Said Robles Casolco, pasión por emprender

Por Carmen Báez

Cuernavaca, Morelos. 8 de junio de 2017 (Agencia Informativa Conacyt).- Originario de Tepoztlán, Morelos, Said Robles Casolco, doctor en ingeniería química metalúrgica por la Facultad de Química de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), combina su pasión por la ciencia y los desarrollos tecnológicos con el emprendimiento y la divulgación científica.

El investigador, adscrito al Centro de Investigación en Ingeniería y Ciencias Aplicadas de la Universidad Autónoma del Estado de Morelos (Ciicap-UAEM), desarrolla en esta institución diversos proyectos, uno de ellos es el biofertilizante con piedra pómez y por el que recibió una distinción por la LII Legislatura local en 2014, mientras que en 2016 obtuvo el Reconocimiento al Mérito Estatal de Investigación (REMEI), en la categoría Divulgación y Vinculación.

Para el investigador y profesor de la maestría en comercialización y desarrollo tecnológico del Ciicap, una actividad fundamental en su quehacer profesional es la transferencia del conocimiento al sector empresarial.

Con la formación que obtuvo en el Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Monterrey (ITESM), campus Puebla, y una estancia en la Universidad Complutense de Madrid, España, aprendió el camino del emprendimiento, que le ha permitido poner mayor énfasis en el aprovechamiento comercial de sus investigaciones.

En entrevista para la Agencia Informativa Conacyt, el doctor Said Robles Casolco compartió sus principales motivaciones en el quehacer científico y tecnológico, así como sus primeros acercamientos con la ciencia.

Ambiente académico, clave en formación profesional

El mejor momento en la vida del doctor Robles Casolco ha sido su paso por la universidad. Desde muy joven conoció el ambiente académico: su padre trabajó en el Instituto de Geografía de la UNAM, lugar donde Said Robles conoció mapas y cartas geográficas. Su madre trabajó en el Archivo General de esa casa de estudios.

“Mi entorno fue la UNAM. Conocer la cartografía y planos me abrió la posibilidad de descubrir ese mundo que de alguna forma plasmaba mi padre. En el trabajo de mi madre era como estar en una biblioteca. Disfruté un ambiente académico en donde se respira tranquilidad. En la universidad se ve cómo la gente sale feliz, sentía que en algún momento podría ser parte de un pequeño mundo de la vida académica, caminar por los pasillos y el campus de una universidad. Felizmente estoy en la UAEM”, destaca.

Respecto a su interés por la ingeniería, el doctor Said Robles lo refiere a sus inquietudes. “Me tocó esa parte de la transición a la maquinaria robusta y quería saber cómo funcionaba. Escuchaba que las máquinas nos iban a resolver la vida y que el fututo sería mejor con la ingeniería y las nuevas tecnologías”, explica.

Cultura de emprendimiento

Para el también docente de la UAEM, la participación de los investigadores en el sector empresarial es necesaria para el desarrollo de la sociedad del conocimiento. “Los investigadores conocen el método científico, tienen múltiples cualidades, pero es necesario que también tengan la oportunidad de sentir un ambiente diferente que hemos visto como hostil: la industria, que es demandante y tiene un pensamiento de acción. A veces en la academia se nos pierde este sentido. Si pudiéramos lograr que la mayoría de los investigadores tuviera mayor contacto empresarial, haríamos una sociedad de empuje y tendríamos una sinergia completamente distinta para una vida socialmente activa en la economía, en lo multicultural, social y que además sea transformadora”, comenta.

Aunque fomentar en su pensamiento la cultura de emprendimiento ha representado un reto para el doctor Said Robles Casolco, es en esta actividad que busca llevar al mercado su más reciente proyecto: una válvula para microcefalia neonatal. El desarrollo puede colocarse en el cráneo del feto a partir de la semana 24 de gestación, momento en que es posible detectar este trastorno neurológico en el que la circunferencia de la cabeza del bebé es mucho más reducida de lo normal. Un feto con microcefalia puede presentar problemas en su desarrollo, discapacidades físicas y de aprendizaje.

El objetivo de la válvula para microcefalia neonatal es reducir los efectos adversos que pueden presentarse durante la gestación, a través de una pequeña incisión en el cráneo del feto que permita la regulación del líquido cefalorraquídeo.

Desarrollo tecnológico

El diseño de este desarrollo brinda la posibilidad de que este pueda colocarse en cualquier ángulo del cráneo. El dispositivo, elaborado de cuatro componentes impresos en tercera dimensión (3D), mide aproximadamente cinco milímetros y se coloca en una cirugía que dura alrededor de 10 minutos. “Debe quedar claro que colocar la válvula no significa que el producto va a nacer sano, no, solo se busca que no existan alteraciones como son problemas de la visión, de movilidad y habla. La idea es disminuir riesgos”, explica Said Robles.

El proyecto nació como una continuación al desarrollo de una válvula para la hidrocefalia, de la cual solo queda registro bibliográfico, pues nunca llegó a la comercialización debido a la falta de experiencia del investigador en la parte de emprendimiento. Hoy, estos errores se convirtieron en una fortaleza para el investigador, con los avances tecnológicos, busca hacer su invento más innovador para posicionarlo en el mercado.

“Retomamos la idea de la válvula de hidrocefalia, la reinventamos, le dimos otras características en el diseño y uso de nuevos materiales biocompatibles. Mi grupo de investigación no se dedicaba a la parte administrativa, pero con el paso del tiempo empieza mi carrera de emprendimiento, entiendo el concepto de dar valor al conocimiento de otra manera, no solo con publicaciones científicas. Parto hacia entender qué es un plan de negocio, la innovación y el emprendimiento para poder cerrar el círculo”, destaca.

Actualmente, Said Robles Casolco busca colocar este proyecto tecnológico en el mercado. La innovación es promovida por ARH Consultores a través del programa Innovarh. “A los investigadores no nos gusta pasar de ese entorno de investigador a vendedor, primero porque tenemos un pensamiento distinto al de los empresarios. Pero hay que dejar por un lado la investidura del conocimiento, el camino es la negociación. Son situaciones totalmente distintas a la vida académica. En este proceso hemos conocido, entendido y realizado colaboraciones con los empresarios”, concluye.

Descargar fotografías.