Hugo Hernández, promotor de la metrología
Por Israel Pérez Valencia
Santiago de Querétaro, Querétaro. 23 de noviembre de 2016 (Agencia Informativa Conacyt).- La metrología se define como la ciencia encargada de las mediciones, unidades de medida y de los equipos utilizados para efectuarlas, así como de su verificación y calibración periódica.
Por su importancia en los procesos de producción del sector industrial, la necesidad de especialistas en metrología es cada vez mayor. Esa fue la percepción del metrólogo Hugo Hernández Tapia que, a través de su trayectoria académica y laboral, descubrió este requerimiento de recursos humanos y de que los egresados universitarios cuenten con ese conocimiento desde la carrera, para poder integrarse de manera más efectiva en este campo laboral.
En entrevista con la Agencia Informativa Conacyt, Hugo Hernández Tapia compartió su interés por difundir la metrología en los jóvenes de nivel medio superior y superior, a través de diferentes estrategias lúdicas y didácticas, plasmadas en proyectos que van desde el diseño de una estación de trabajo con propósitos educativos hasta Metrology School, una iniciativa que convoca a instituciones educativas, centros de investigación y empresas del sector automotriz.
Agencia Informativa Conacyt (AIC): ¿Cómo surge su interés por la metrología?
Hugo Hernández Tapia (HHT): Yo incursiono en el tema de mediciones en el 2003, casi recién egresado de la carrera, en el Instituto Tecnológico de Celaya —que forma parte del Tecnológico Nacional de México (Tecnm)—, donde estudié ingeniería industrial. De ahí surgió mi interés sobre la metrología, lo que me llevó a incursionar en el sistema de tecnológicos, particularmente en el Centro Regional de Optimización y Desarrollo de Equipo de Celaya (CRODE).
Mis objetivos respecto a trabajar en el CRODE eran participar en normas de competencia laboral, que era un proyecto desarrollado por el Centro Nacional de Metrología (Cenam) en conjunto con el Conocer del Sistema Nacional de Competencias —que es un instrumento del gobierno federal para la promoción de competencias laborales—, así como diseñar un laboratorio de metrología.
AIC: ¿Cómo se integra a la actividad docente?
HHT: Tiempo después me integré a la industria automotriz para trabajar como ingeniero de dispositivos de medición donde adquirí gran experiencia y la necesidad de compartirla a través de la academia, dando clases, para que cuando los estudiantes de ingeniería llegaran a las empresas ya tuvieran conocimientos más sólidos en estas áreas de la metrología.
En el 2005, me integro a dar clases en el Tecnológico de Celaya y el Instituto de Estudios Superiores del Bajío (Unitesba) donde empiezo a hacer este tipo de dinámicas de concursos académicos entre estas dos instituciones, lo que generó buenos resultados. Buscábamos que los estudiantes aprendieran temas de metrología a través de conceptos lúdicos y juegos, porque a priori la metrología suele parecer algo aburrido y tedioso.
AIC: ¿Qué estrategias llevó a cabo para despertar el interés de los jóvenes hacia la metrología?
HHT: Algo que aportó mucho para que se diera esto fue un proyecto que desarrollé mientras estudiaba la maestría, que de hecho fue mi tema de tesis. Se trata de una estación didáctica de metrología industrial, que a la fecha la sigo utilizando para dar cursos de capacitación en las escuelas y en la industria para tratar de hacer más dinámico, divertido y espontáneo el estudio de las mediciones.
AIC: ¿En qué consiste esta estación didáctica de metrología industrial?
HHT: Es una herramienta diseñada para que los estudiantes puedan entender temas muy importantes en la industria automotriz, como son el análisis de sistemas de medición, tolerancias geométricas y dimensionales. En este proyecto tuve el apoyo y asesoría del doctor Salvador Echeverría Villagómez, quien es el director del área de Metrología Física del Cenam, donde también estuve trabajando en el área de gestión de proyectos.
La estación se compone de varios elementos: el primero es un carro didáctico desarmable que trae consigo piezas de aluminio y acero inoxidable, que son importantes en la industria automotriz, como son el chasís, llantas, rines, sistema de transmisión y carrocería.
Otros elementos son los dispositivos para medir las diferentes características de las piezas, que fueron diseñados bajo un concepto de Lego. Siempre busqué que la estación didáctica fuera un sistema que el usuario pudiera armar en diferentes configuraciones para la medición de las piezas.
AIC: ¿De qué otros elementos se compone la estación?
HHT: Otro de los elementos es un software, que fue programado en un lenguaje muy básico para poder hacer los cálculos matemáticos que el usuario necesita para obtener la medición correcta de las piezas a través de los dispositivos. En él se introducen los valores de las mediciones y automáticamente da la aceptación o rechazo de las piezas con base en fórmulas que están programadas de acuerdo con la normatividad ya conocida.
Otro de los elementos es una mesa con una superficie que tiene barrenos que están a cinco centímetros de distancia cada uno, esto ayuda a configurar y ensamblar los diferentes dispositivos para la medición de las piezas y, por su extensión, pueden trabajar hasta cuatro usuarios simultáneamente.
El último es un manual de prácticas, donde los estudiantes pueden aprender temas como las tolerancias geométricas y dimensionales, que es interpretación de planos, y estudios estadísticos para validar los sistemas de medición. El manual está diseñado bajo estos lineamientos y está sustentado en las normas que se aplican en la industria.
AIC: Hablando de los procesos de enseñanza y aprendizaje, ¿cómo se emplea esta tecnología en el salón de clase?
HHT: Esta estación la llevo a las clases que doy en escuelas e incluso en cursos y conferencias que imparto en la industria. Es la columna vertebral para estos procesos de enseñanza y de aprendizaje.
De hecho, como proyecto final, los estudiantes tienen que diseñar un dispositivo que pueda medir parte de las piezas que se encuentran en la estación. Se muestran piezas a los estudiantes para que ellos las dimensionen, y como tarea deben entregar un dibujo de una de ellas para lo que es el tema de 
tolerancias geométricas. Después se les pide que fabriquen la pieza que midieron.
Las piezas las pueden mandar a hacer de metal con un tornero, o de madera. Lo importante es que tenga las medidas que realizaron; eso se hace al principio del curso, después, ellos tienen que diseñar también su propio dispositivo de medición.
AIC: ¿En qué asignaturas se utiliza esta estación de trabajo?
HHT: Esta tecnología solo la hemos usado en la asignatura de metrología; sin embargo, si la visualizamos en un enfoque de ingeniería industrial, puede usarse muy bien para lo que es control estadístico de procesos, estudio del trabajo en tiempos y movimientos; incluso hasta en asignaturas enfocadas en la ergonomía en lo que se refiere a la medición de altura y distancias entre las manos y piezas en una estación de trabajo.
Estamos en proceso de difundir y dar a conocer lo que ofrece la estación en lo que se refiere a la didáctica de la metrología, porque, si bien es cierto es una alternativa novedosa de poder impartir conocimientos sobre metrología, hace falta que se le dé el beneficio de la duda. De hecho, esta fue la base para crear el concepto de Metrology School.
AIC: ¿Qué es Metrology School?
HHT: Es un proyecto cuyo objetivo es acercar la metrología a los jóvenes de escuelas de nivel medio superior y superior a nivel nacional a través de concursos de diseño de dispositivos de medición, además de cursos y talleres sin costo para la gente de la industria automotriz.
El proyecto lo iniciamos en 2015 y nos apoyan centros de investigación como el Cenam, el Centro de Ingeniería y Desarrollo Industrial (Cidesi), el Centro de Tecnología Avanzada (Ciateq), además de empresas de la industria automotriz.
Desde el 2015 que echamos a andar el proyecto hemos tenido un crecimiento exponencial muy importante, con esto queda claro que se puede promover el interés por esta área del conocimiento que es la metrología tanto en jóvenes como en gente que ya está integrada en el sector industrial.
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