La FIL también es ciencia y la ciencia también es cultura
Por Susana Paz
Guadalajara, Jalisco. 30 de noviembre de 2014 (Agencia Informativa Conacyt).- Grandes científicos se reunieron en el panel magistral de apertura La FIL también es ciencia con el que se inauguró el programa de actividades de divulgación científica en la Feria Internacional del Libro (FIL) de Guadalajara.
Acudieron el científico Ruy Pérez Tamayo, calificado en el panel como una institución en el campo de la medicina y la patología; José Sarukhán Kermez, eminencia en el área de la biología y coordinador de la Comisión Nacional para el Conocimiento y Uso de la Biodiversidad (Conabio); Jorge Flores, investigador del Instituto de Física de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) y el director general del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt), Enrique Cabrero Mendoza.
Para el rector de la Universidad de Guadalajara (U. de G.), Itzcóatl Tonatiuh Bravo, quien presentó el panel, con este nuevo programa de carácter científico la FIL pretende impulsar una tradición de divulgación de la ciencia y un encuentro que permita ofrecer nuevos espacios.
“En esta edición 2014 se presenta por primera vez este programa mediante el cual se han articulado las diferentes actividades que abordan el quehacer científico y cuya finalidad es convertirse en un espacio que contribuya a la divulgación de la ciencia. Su desarrollo representa una gran oportunidad para acceder a nuevos públicos e introducirlos a este tema para aportar a la difusión del conocimiento”, expresó el rector.
El director del Fondo de Cultura Económica (FCE), José Carreño Carlón, quien fue moderador del encuentro, expresó que esta primera edición de divulgación científica se realiza con el auspicio del Conacyt y en una alianza con el FCE, además de recordar que la editorial tiene una gran tradición con sus colecciones y ediciones para promover la cultura científica.
“Van a descubrir que los científicos también son fuente de cultura, en realidad, no hay mayores fronteras entre la cultura y la parcela científica. Este debate gira en torno a la necesidad de acercar los temas y el conocimiento científico a la agenda cultural, de hermanarlos como nunca debieron haberse separado. Porque es un hecho que la ciencia forma parte de la cultura”, aseveró Carreño Carlón.
Ciencia, tecnología y comunicación
El primer debate alrededor de la ciencia lo inició el científico Ruy Pérez Tamayo, quien la definió como una actividad humana y creativa, cuyo objetivo es la comprensión de la naturaleza y su resultado es el conocimiento científico. El patólogo, quien obtuvo el Premio Nacional de Ciencias en 1974, aseveró que el conocimiento, que es el fruto de la ciencia, es el instrumento más importante que tiene el científico para generar nuevas ideas.
El exrector de la UNAM, José Sarukhán, señaló la crisis de conciencia ambiental que se vive actualmente y que se ve reflejada en la “mínima” relación de los individuos con la naturaleza, el nulo respeto y ética ambiental. A su juicio, no hay prioridad acerca del medio ambiente en los medios de comunicación, ni en la sociedad. Por ello consideró la urgencia de un acercamiento de la gente con la naturaleza y se pronunció sobre la conciencia ciudadana mediante la divulgación científica.
Como alternativa y aprovechando a los cambios en las tecnologías de la información, presentó el programa Naturalista, que desde la Conabio ha impulsado como una plataforma que permite a cualquier persona dialogar y compartir sus intereses sobre la ciencia y la biodiversidad en México y en todo el mundo.
A consideración de Jorge Flores, un aspecto relevante es que ha faltado llevar la comunicación de la ciencia a los que toman las decisiones de las políticas públicas, ya sea en el ámbito académico, el gobierno en todos sus niveles y el sector empresarial, además de afirmar que en el área de la divulgación científica hay tanto logros como carencias.
Para el director general de Conacyt, Enrique Cabrero Mendoza, la importancia de este primer encuentro era escuchar a los grandes científicos y recordar la relevancia que tiene para México la generación del conocimiento y su divulgación.
“El tema que está claro es cómo construir en México una sociedad del conocimiento y cómo transitar a ella. Esto es un gran reto, la sociedad se siente distante del conocimiento científico. Las encuestas que hace el Conacyt sobre la cultura científica demuestran que en el país una gran parte de la población cree más en la magia que en la ciencia”, expresó el funcionario.
Para Cabrero Mendoza, el desafío consiste en lograr la apropiación del conocimiento y en cómo ir transitando hacia la sociedad del conocimiento. No obstante, celebró y reconoció la existencia de editoriales como el FCE, que ha hecho una labor importante en América Latina con su gran colección de divulgación científica a través del libro, del que dijo, también es ciencia.
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