Mito: Cenar fruta engorda
Por Génesis Gatica Porcayo
La imagen corporal y la alimentación siempre serán temas de debate y preocupación poblacional, toda la información que se encuentra en internet al respecto además de los remedios ancestrales más comunes, hablan de qué hacer y qué no hacer para evitar engordar, entre estos temas está la pregunta que menciona el consumo de frutas en la cena y el aumento de peso.
Especilistas nutricionales e investigadores en alimentos, contestan frecuentemente el ¿por qué comer fruta en la cena engorda?, un cuestionamiento muy común entre las personas que buscan perder peso, pero es necesario saber cuál es la realidad que hay detrás de este mito.
Los profesionales de la salud enfocados en la investigación nutricional, mencionan que cenar fruta no engorda más que consumirla en cualquier otro momento del día. Es decir, no se ingieren más calorías si se consume fruta durante la mañana o la tarde.
En términos generales, las frutas son un grupo de alimentos que tienen pocas calorías, cuyo principal aporte al organismo es la fibra, vitaminas, minerales y antioxidantes. Se menciona que comer incluso una fruta antes de cenar, brindará mayor saciedad al cuerpo, pues el apetito se reduce haciendo que el consumo de alimentos y por ende de calorías sea menor.
Una importante mención es que las frutas se clasifican en grupos por su contenido calórico; sin embargo, la diferencia entre dichos grupos es mínima y si se consumen en el desayuno o cena es irrelevante. En todo caso, es importante conocer las porciones indicadas para cada fruta así como su frecuencia de consumo.
Los especialistas coinciden en que posiblemente la principal confusión sobre este tema se debe al considerar la utilización metabólica del componente principal de las frutas que son los hidratos de carbono, que son los nutrientes utilizados prioritariamente por el organismo para obtener la energía necesaria todos los días.
Si uno consume fruta durante las primeras horas del día, los hidratos de carbono son utilizados rápidamente como energía. Por el contrario, si se consume en periodos nocturnos, el aprovechamiento de estos nutrientes será más lento, pues las actividades se reducen y por ende el metabolismo baja.
Esto no significa que comer fruta por la noche engorde, sino que los hidratos de carbono son utilizados de manera más lenta y lo recomendable es consumir por lo menos cinco porciones diarias para tener aportes beneficiosos a la salud.
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