Gustavo Meza, un joven talento en matemáticas
Por Tomás Dávalos
Aguascalientes, Aguascalientes. 24 de noviembre de 2016 (Agencia Informativa Conacyt).- Gustavo Meza García, de 18 años de edad, es un entusiasta de las matemáticas que ha obtenido diversas distinciones por sus habilidades numéricas.
Es apenas la tercera persona oriunda de Aguascalientes que ha ganado una medalla de oro en la Olimpiada Mexicana de Matemáticas, y este año obtuvo el primer lugar a nivel nacional en el Festival Académico de la DGETI dentro de la misma especialidad.
En entrevista para la Agencia Informativa Conacyt, este joven que actualmente cursa el primer semestre de ingeniería artificial en la Universidad Panamericana, campus Aguascalientes, explica acerca de cómo nació y evolucionó su gusto por las matemáticas.
Agencia Informativa Conacyt (AIC): ¿Cómo descubriste que tenías habilidades para las matemáticas?
Gustavo Meza García (GMG): Cuando yo estaba en tercero de primaria mi mamá me invitó a un curso que iba a haber para los maestros de primaria (…) El profesor de lo que era el taller daba matemáticas, pero de otra forma, de una forma más enfocada en ver lo bonito de ellas y no tanto su utilidad.
Ese curso de una semana a mí me gustó más que a todos los profesores. Yo quedé fascinado con las matemáticas porque vi lo bonito, más que lo funcional, y pues así empezó mi gusto.
AIC: ¿Fue muy distinto lo que viste ahí a lo que venías aprendiendo en clases?
GMG: Sí, porque ahí lo que vi eran matemáticas enfocadas en detectar patrones o tratar de explicar fórmulas, como explicar por qué determinada fórmula sirve y ver las matemáticas que están escondidas en la naturaleza y ese tipo de cosas.
Y las matemáticas de la escuela son más como ten esta fórmula, ten estos datos y calcula el resultado, no hay tanto proceso para tratar de descubrir cosas.
AIC: ¿Cómo le diste continuidad a lo que aprendiste en aquel curso?
GMG: Lo que me gustaba mucho era hacer acertijos matemáticos, me compraba un libro cada seis meses y hacía los acertijos, pero no llevé ninguna clase extracurricular, hasta que en segundo de secundaria mi profesor de matemáticas me dice: “Gustavo, tienes mañana examen”, y era sábado, y yo sí me saqué de onda. Pues resultó que ese examen era de la Olimpiada de Matemáticas, y ya desde ahí empecé el camino de las olimpiadas.
En esa primera participación llegué hasta el nacional, no obtuve nada pero sí llegue hasta ahí. En la olimpiada compiten alumnos de secundaria y preparatoria, van los seis mejores por estado, de los cuales al menos dos deben ser de secundaria.
AIC: Posteriormente, ¿en qué otras competencias participaste?
GMG: Ahí en la Olimpiada de Matemáticas, me empezaron a hablar mucho de la Olimpiada de Informática, porque muchos de los que estaban ahí también estaban participando en esa, entonces cuando salió la convocatoria me la pasaron.
Me inscribí y ese año también me tocó ir al nacional. En la Olimpiada de Informática son nada más cuatro lugares por estado. En esa sí saqué medalla de bronce, y yo fui el bronce más cercano a la plata. Me invitaron a formar parte de los preselectivos para el internacional, pero ahí ya no pasé.
También ese mismo año, una maestra me inscribió a otro concurso de matemáticas, ese era específico para secundarias, y pasé y saqué medalla de bronce en la etapa nacional.
AIC: ¿Qué te dejaron esas primeras participaciones?
GMG: Yo creo que lo más importante fue que me dejaron gusto, ganas de seguir participando, de seguir preparándome. También en las olimpiadas conoces a gente que les gusta más o menos lo mismo que a ti, y como que así hasta uno se impulsa.
AIC: Pasas posteriormente a preparatoria, ¿cómo seguiste tu formación en matemáticas?
GMG: Pues yo escogí el CBTis porque es una buena escuela, pero a la vez no te ocupan tanto tiempo, pues yo quería seguir con lo que a mí me gustaba, y el CBTis me daba la oportunidad de prepararme en la escuela, como prepararme en lo que a mí me gusta, que son las olimpiadas.
AIC: ¿Cómo es una preparación para una olimpiada?
GMG: La idea básica es hacer problemas, consigues un libro que tiene muchos problemas y la idea es intentarlos. Probablemente no te salgan muchos porque en los problemas de olimpiada tienes que pensar de una manera más creativa, y eso se logra haciendo problemas que no sabes ni cómo atacar ni cómo resolver.
Si no te sale, ves la solución y de ahí ves que fue la idea que no se te ocurrió, y tratas de pensar cómo podrías llegar a esa idea y así te vas volviendo mejor en tener ideas buenas.
La mayor parte de mi preparación fue autodidacta, como han sido pocos los (aguascalentenses) que han tenido buenos resultados, no tenía a quién preguntarle. De hecho, en mi segundo año de participación en la olimpiada entrené muchísimo y no mejoré casi nada porque me preparé mal, porque en vez de hacer problemas me la pasé leyendo cosas. Tenía mucha teoría, pero mi cerebro no estaba entrenado para enfrentar las cosas que no había visto antes, pero aprendí de eso y el próximo año me preparé de una manera distinta.
Yo fui mi entrenador principal. Ya después, otro de los que le había ido bien en la olimpiada, Flavio Hernández, me contacté con él y me empezó a asesorar, pero la mayor parte fue de ver yo qué hago.
AIC: ¿Qué resultados obtuviste en las olimpiadas a lo largo de la preparatoria?
GMG: En la segunda Olimpiada de Matemáticas en que participé saqué medalla de bronce en la nacional. Luego participé de nuevo en la Olimpiada de Informática, mi segunda participación, ya iba más seguro, mejor preparado y saqué medalla de oro. Igual sacas medalla y te preseleccionan para el internacional.
Pero informática no era lo que a mí me gustaba, me gustaba más matemáticas y no estaba dedicándole tanto tiempo, por lo que dejé la informática.
De matemáticas, en mi segunda participación saqué medalla de plata y en la tercera saqué medalla de oro. También ahí te preseleccionan para el internacional, es más estricto que en el de informática, y me estuve preparando, hubo una concentración de todos los que habíamos quedado, éramos 16 y pasé en octavo, seis se van a la internacional. Luego hubo otra concentración y esa vez me fue muy mal, bajé de octavo al 15 y ya me sacaron.
AIC: ¿En qué otros concursos llegaste a participar?
GMG: En el Festival Académico de la DGETI, es un concurso nacional entre todas las escuelas de la DGETI, o sea CBTis y CETis, cada estado lleva a sus alumnos. Yo iba participando en la modalidad de matemáticas representando a Aguascalientes y saqué el primer lugar nacional.
AIC: ¿Crees que haya alguna forma de que los alumnos se interesen más por las matemáticas?
GMG: Claro que sí. Yo entiendo que hay bases para la sociedad, que cualquier individuo debe saber de matemáticas para llevar el día, lo que es aritmética, el porcentaje, y está bien que den las fórmulas y los algoritmos para eso, pero por ejemplo, hay muchas cosas que no se aplican y que no despiertan ninguna curiosidad.
Yo sustituiría esos temas por los que son más enfocados en la belleza de las matemáticas, en reconocer patrones. También una materia de resolución de problemas, se dice que la Olimpiada de Matemáticas no es de matemáticas, es de resolver problemas, es solo que las matemáticas es la forma más fácil de enfrentar esos problemas, o sea, no tanto te evalúan matemáticas, te evalúan qué tan bien resuelves un problema.
También el tipo de cosas que se dan que no sea 'te voy a dar este tema, aquí están las fórmulas, aplícalas', sino que tú vayas desarrollando por ti mismo tus propias fórmulas para resolver eso. Creo que sí hay muchas cosas que se podrían mejorar de la enseñanza de las matemáticas, como orientarlas más a un proceso creativo, que a un proceso de seguir reglas.
AIC: ¿Trataste de transmitir a tus compañeros tu pasión por las matemáticas?
GMG: A mí me da mucha tristeza, porque yo sabía que mis compañeros aborrecían las matemáticas, lo que conocían de ellas, que es más como ser una calculadora que hacer matemáticas. En parte los entendía, porque si yo no hubiera recibido esa clase en tercero de primaria, probablemente estaría igual, pues a mí no me gusta seguir las cosas sin saber bien el porqué, entonces en parte los entendía y a los más cercanos a mí trataba de enseñarles las cosas que me habían sorprendido.
Y sí tuvo eco: a uno de mis amigos le empecé a enseñar y se interesó, lo inscribí en la Olimpiada de Matemáticas y le gustó y se fue al nacional, no ganó nada, pero ahorita puedo decir que es un entusiasta, le mando un artículo sobre matemáticas y sí le interesa.
AIC: ¿Por qué decidiste estudiar inteligencia artificial?
GMG: Pues básicamente son matemáticas aplicadas, todos los patrones que sigue una computadora son modelos matemáticos.
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