¿Qué enfermedad aqueja a las tortugas marinas?
Por Joel Cosío
La Paz, Baja California Sur. 22 de marzo de 2016 (Agencia Informativa Conacyt).- Un grupo de investigadores de la Universidad Autónoma de Baja California Sur (UABCS), en conjunto con el Centro de Investigaciones Biológicas del Noroeste (Cibnor), el Centro Interdisciplinario en Ciencias Marinas (Cicimar) y la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (Conanp), está monitoreando diversas especies de tortugas marinas con el propósito de estudiar los factores ambientales y biológicos que afectan los quelonios en los litorales de la Península de California.
"En particular nos estamos enfocando en las enfermedades que aquejan a estos reptiles, porque se han registrado alarmas de mortandad de especies de tortugas en algunas zonas de concentración", mencionó la doctora María Mónica Lara, nivel I del Sistema Nacional de Investigadores (SNI) del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt), quien además es responsable de la investigación en la UABCS.
El estudio considera las poblaciones de tortuga prieta (Chelonia mydas), carey (Eretmochelys imbricata), amarilla (Caretta caretta), golfina (Lepidochelys olivacea) y esporádicamente laúd (Dermochelys coriacea), en litorales del Parque Nacional Archipiélago de Espíritu Santo, Bahía La Paz, Puerto Adolfo López Mateos y en diversas zonas de anidación de San José del Cabo, Cabo San Lucas y El Saltito, en La Paz, además los análisis son comparados con monitoreos a tortugas realizados en la Península de Yucatán.
Fibropapilomatosis
Mónica Lara con tortuga carey.La fibropapilomatosis (FPTM) es uno de los padecimientos que han llamado más la atención entre los científicos a causa de su creciente expansión entre las poblaciones de tortugas en los litorales de la Península de California.
“Desde hace muchos años el fibropapiloma está aquejando a los quelonios, en las partes blandas de las tortugas crecen tumores, se alojan en los ojos, la nariz, la garganta, les inhibe el apetito y su sistema inmunológico se debilita pudiéndoles provocar la muerte”, mencionó la doctora María Mónica Lara.
La fibropapilomatosis es una condición estudiada por científicos de centros de investigación internacionales en distintas zonas del mundo, paralelamente, en la investigación de la UABCS se están aplicando diversas pruebas para intentar aislar e identificar el agente etiológico de la enfermedad.
“Se desconoce la forma de contagio del fibropapiloma en los quelonios y no se ha logrado aislar el virus; al ser animales marinos migratorios, es muy difícil tener una muestra para observar el desarrollo de la enfermedad”, mencionó Mónica Lara.
Datos de la investigación indican que históricamente la fibropapilomatosis estaba presente en alrededor de uno por ciento de la población de tortugas en costas mexicanas; sin embargo, la tendencia ha ido en aumento en los últimos años.
“El porcentaje de quelonios infectados ha incrementando; en zonas de Campeche se ha registrado un aumento de cinco por ciento de la población, en Baja California Sur también se ha registrado un aumento de fibropapilomatosis en las tortugas”, afirmó la doctora Mónica Lara.
Parásitos, virus y bacterias
La investigación integra el análisis de nuevos patrones de vida de las poblaciones de tortugas a causa del cambio climático y fenómenos naturales como El Niño que se caracteriza por altas temperaturas.
Mónica Lara con tortuga carey.Datos del estudio indican que el número de varamientos de especies como la tortuga amarilla se ha reducido a causa de cambios en la abundancia y rutas de desplazamiento de la langostilla, especie esencial en la alimentación de estos reptiles, a causa de las corrientes cálidas provocadas por El Niño que han alterado su trayectoria de migración.
Una de las condiciones biológicas que ha generado interés en la investigación es la sensibilidad corporal de la especie ante cambios de temperatura del agua del mar; también han registrado parásitos, virus y bacterias que afectan a los ejemplares documentándose riesgos en zonas de anidación, malformaciones en las crías y problemáticas con el consumo de huevos de tortugas por las comunidades costeras.
Los resultados que se obtengan de esta investigación tendrán aplicaciones para la conservación de las especies analizadas, de las cuales dos están en peligro crítico de extinción: la tortuga carey y laúd. Además, dentro de las operaciones se ofrecen pláticas de concienciación a las comunidades costeras para prevenir el consumo ilegal de estos animales.
Cabe mencionar que los monitoreos y análisis de los especímenes son estrictamente regulados y se procura no dañar a los ejemplares, los cuales son capturados en su hábitat, a bordo de embarcaciones, en donde se extraen las muestras para sus análisis e inmediatamente son liberados en condiciones óptimas de salud.
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