Epidemiología de la tuberculosis en México
Por Yureli Cacho Carranza
México, DF. 21 de marzo de 2015 (Agencia Informativa Conacyt).- En el marco del Día Mundial de la Tuberculosis, celebrado cada 24 de marzo, el Perfil Epidemiológico de la Tuberculosis en México, de la Secretaría de Salud (SSA) señala que nuestro país ha alcanzado un 85.3 por ciento de éxito en materia de tratamiento para esta enfermedad.
No obstante, México mantiene una tendencia ascendente en la incidencia de mortalidad por tuberculosis. “Cada año se detectan alrededor de 15 mil nuevos casos de tuberculosis pulmonar y cerca de 2 mil defunciones por esta causa”, informó la doctora Graciela Solache Alcaraz, médica epidemióloga y doctora en Antropología adscrita al Servicio de Infectología del Hospital General de México.
“Al igual que lo reportado por la Organización Mundial de la Salud (OMS), en México, como en el mundo, la tuberculosis afecta principalmente a los hombres, de manera que 60 por ciento de los casos corresponden a este género”, mencionó Solache Alcaraz, quien es docente en la Facultad de Medicina de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
En cuanto a la edad, “el grupo con mayor número de casos es de 65 años o más, y por distribución geográfica el estado con la mayor tasa de incidencia es Baja California, seguido de Tamaulipas, Nuevo León, Nayarit, Guerrero y Chiapas”, comentó.
Áreas de oportunidad para el tratamiento
Por su parte, el doctor César Rivera Benítez, jefe del Servicio de Infectología del Hospital General de México, explicó que las principales áreas de oportunidad para un mejor y mayor control de la tuberculosis en el país son: evitar la fragmentación y segmentación del sistema de salud, la detección oportuna, mejorar el acceso a laboratorios diagnósticos, el abasto de medicamentos y el apego al tratamiento.
Lo anterior, agregó el entrevistado, de acuerdo con la Evaluación Externa del Programa de Control de Tuberculosis de México, realizada por la Organización Panamericana de la Salud (OPS) y publicada en agosto de 2013.
“En este sentido, cabe destacar que el tratamiento convencional de la tuberculosis comprende multifármacos, cuya ingesta debe mantenerse por seis meses ininterrumpidos, ocasionando en algunos casos posible efectos adversos, por lo que el abandono del régimen o la medicación es frecuente”, manifestó el doctor Rivera Benítez, quien también es profesor de la asignatura de Infectología en la UNAM y en la Universidad Anáhuac.
“Durante décadas, no se han sumado nuevos fármacos en el tratamiento contra la tuberculosis. Sin embargo, el surgimiento de cepas multirresistentes alrededor del orbe ha dado pie a incipientes investigaciones en este rubro, lo cual está dando frutos esperanzadores al incorporarse una nueva generación de antifímicos (medicamentos contra la tuberculosis) que permitirán contar con esquemas simplificados de menor duración y toxicidad”, reveló el catedrático.
Asimismo, existe una vigorosa investigación en el rubro de pruebas diagnósticas que permitirán detectar la enfermedad en etapas tempranas, concluyó.
Población vulnerable
En palabras de la epidemióloga Graciela Solache Alcaraz, en México las personas más afectadas por tuberculosis son los indígenas, migrantes, personas privadas de su libertad y la población rural en general; es decir, gente con un alto nivel de marginación y exclusión social que vive en condiciones de hacinamiento y pobreza.
“Actualmente, la tuberculosis continúa siendo una patología de la pobreza, tal como lo describiera en México el pionero de investigación clínica en tuberculosis, doctor Alejandro Celis Salazar, en 1971”, subrayó la doctora.
De acuerdo con el Reporte Global de Tuberculosis 2012 de la OMS, referido por la entrevistada, cerca del 95 por ciento de las muertes por tuberculosis se producen en países de ingresos bajos y medianos. México ocupa el tercer lugar en América Latina en incidencia de tuberculosis pulmonar.
La especialista agregó que de 2001 a 2011 se notificaron en nuestro país 165 mil 597 nuevos casos de tuberculosis pulmonar, 2 mil 398 de tuberculosis meníngea y 28 mil 696 casos de otras formas de tuberculosis, lo que da un acumulado de 196 mil 691 casos nuevos notificados.
El contagio
De acuerdo con la epidemióloga, “la tuberculosis se trasmite por vía aérea, a través de las gotitas que expelen al toser o expectorar las personas con tuberculosis pulmonar. Esas pequeñas gotas infectantes pueden permanecer en suspensión en el aire durante largos periodos y diseminarse a más de 10 metros de distancia”.
Es esa característica la que le confiere a la enfermedad la capacidad de transmitirse sobre todo en ambientes con hacinamiento o aglomeración de personas, con mala ventilación y falta de iluminación solar, explicó.
El riesgo de contagio, agregó la especialista, depende de la infectividad de la fuente, la proximidad del contacto, la duración de la exposición y la densidad bacteriana en el ambiente que se respira.
“Aunque el riesgo de enfermar por tuberculosis está en función del deterioro en la inmunidad celular del huésped, tal como ocurre en personas con infección por VIH, desnutrición, diabetes, abuso de alcohol, consumidores de drogas, tratamiento con corticoides o inmunosupresores, cáncer de cabeza y cuello, leucemia e insuficiencia renal crónica; también está involucrada la virulencia del bacilo", aclaró Solache Alcaraz.
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