Diseñan innovador balón gástrico para combatir la obesidad
Por Verenise Sánchez
México, DF. 21 de marzo de 2015 (Agencia Informativa Conacyt).- La obesidad se ha convertido en un problema de salud mundial, ya que de 1980 a 2014 se duplicó en el mundo el número de personas con dicha enfermedad, de acuerdo con datos oficiales de la Organización Mundial de Salud (OMS).
Según este organismo de las Naciones Unidas, en el mundo hay mil 900 millones de adultos con sobrepeso, de los cuales más de 600 millones tienen problema de obesidad.
Uno de los países con más casos de obesidad es México. De acuerdo con la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición (Ensanut) 2012, el 71 % de adultos mexicanos padecían de sobrepeso y obesidad en ese año.
Cabe destacar que el sobrepeso y la obesidad conllevan al desarrollo de enfermedades crónicas no transmisibles, como la diabetes mellitus y las enfermedades cardiovasculares, que son las dos principales causas de mortalidad general en México, según la Ensanut.
Para combatir la obesidad, el doctor José Rafael Garza Álvarez, cirujano del Hospital Ángeles del Pedregal –ubicado en la Ciudad de México– especializado en gastroenterología, diseñó un novedoso balón gástrico denominado Intraglobe que, a diferencia de los que existen actualmente en el mercado, es inflado con aire y no con agua, lo cual lo hace más ligero y más cómodo.
Tratamiento integral
El balón ayudará a que el paciente tenga una sensación de saciedad y evitar así la ingesta excesiva de alimentos, lo que favorecerá la pérdida de peso. Sin embargo, este balón no es milagroso, ya que para que se puedan 
perder esos kilos de más es necesario un tratamiento integral que incluya una alimentación balanceada y ejercicio moderado. “Lo importante no es solamente tener el balón, sino seguir una dieta y lograr una reeducación alimenticia”, subrayó Garza Álvarez.
Agregó que “el tratamiento debe ser integral, el paciente debe ser atendido por un médico general que le revise los niveles de azúcar, colesterol y triglicéridos, un nutricionista para que le lleve una dieta adecuada y un psicólogo o psiquiatra, porque la mayoría de las personas con problemas de obesidad tienen problemas psicológicos o psiquiátricos que los hacen comer de más”.
Detalló que todo lo anterior dura alrededor de dos años y es casi tan eficaz como la cirugía baipás gástrico, ya que ese lapso es el suficiente para que una persona pueda llegar a su peso normal y pueda conseguir una reeducación alimenticia.
“La reeducación alimenticia es primordial, porque si el paciente después de concluir su tratamiento sigue comiendo en exceso alimentos con alto valor calórico, va a engordar de nuevo. No es que se prive de esos alimentos, es solamente que los consuma con moderación”, manifestó.
Balón de aire
En entrevista para la Agencia Informativa Conacyt, el especialista indicó que “todos los plásticos son permeables al aire; nosotros encontramos en Estados Unidos una empresa que realiza una sustancia que tiene la capacidad de impermeabilizar este globo, no lo impermeabiliza al 100 por ciento pero si en un 70 u 80 por ciento, y eso nos permite que el balón sea inflado con aire y no con agua”.
Detalló que este balón está fabricado de silicona biomédica, un material que casi no genera rechazo dentro del organismo, y de hecho uno de los más utilizados por los cirujanos plásticos.
Garza Álvarez explicó que existen dos tamaños de balones: uno con capacidad para medio litro y otro de hasta un litro, los cuales se colocan dependiendo del tamaño del estómago del paciente.
Para su colocación, se requiere de un proceso endoscópico y quirúrgico que dura alrededor de media hora. Durante la intervención quirúrgica se introduce el balón desinflado por la garganta hasta que llega a la boca del estómago; una vez que está ahí se hacen dos pequeñas incisiones en el abdomen, para que el gastroenterólogo pueda acomodar y sujetar el balón al estómago con hilo de nailon.
Esta es justo otra de las ventajas que tiene esta innovación, ya que a decir de Garza Álvarez: “Uno de los riesgos de los balones convencionales es que al quedar 
libre en el estómago están en constante movimiento y son más propensos a que se rompan y sean degradados por los jugos gástricos, y al tratar de ser digeridos por el organismo puedan bloquear los intestinos; de ocurrir esto se requeriría de una cirugía de emergencia”.
En cambio, este nuevo balón al ir sujeto con hilo tiene una vida útil más larga. Puede durar hasta dos años, mientras que el convencional tiene una duración aproximada de seis meses.
Asimismo, explicó el especialista, otra de las ventajas de este nuevo balón es que se puede inflar o desinflar según las necesidades del paciente: “Durante los primero días inflamos el balón a la mitad de su capacidad para que el organismo de la persona se vaya adaptando a este objeto; ya después, si es necesario, se infla más”.
Esto es posible debido a que se introduce una válvula subcutánea, la cual se puede pinchar muchas veces para que a través de esta se pueda meter o sacar aire. Lo anterior, reiteró Garza Álvarez, es un gran paso respecto a los balones que se rellenan con agua, porque esos desde el principio se deben llenar a su capacidad objetivo, lo cual provoca muchas incomodidades, dolor y náusea en el paciente.
Innovación en el mercado
Después de diversos estudios y protocolos de investigación que fueron financiados por el Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt), a través del Fondo de Innovación Tecnológica (FIT), este desarrollo ya fue aprobado por la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris).
| Para mayor información, consulta la página www.globalmedd.com; o comunícate con el doctor José Rafael Garza Álvarez a los teléfonos 56528664 y 55727372, y en el correo electrónico: Esta dirección de correo electrónico está siendo protegida contra los robots de spam. Necesita tener JavaScript habilitado para poder verlo.. |
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“En 2008 hicimos el protocolo de investigación porque ya teníamos el aparato pero no sabíamos si funcionaba o no; con el Centro de Ciencias Aplicadas y Desarrollo Tecnológico (CCADET) de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), y con el financiamiento del Conacyt, hicimos algunas pruebas y comprobamos su efectividad”, comentó.
Garza Álvarez destacó que en 2011 Cofepris autorizó el producto, y actualmente ya se cuenta con la patente tanto del dispositivo como de la técnica quirúrgica en diversos países como Estados Unidos, Canadá y China.
Señaló que el balón gástrico Intraglobe ya se comercializa en algunos hospitales del país bajo el sello de la empresa Global Medical Devices y, a través de la aceleradora de empresas TechBA y el Conacyt, se busca que el dispositivo también se pueda distribuir en otros países.
“Hace un mes nos invitó Conacyt y TechBA a Silicon Valley para presentar nuestro dispositivo y ver si podemos hacer una transferencia tecnológica a otras empresas, para que más gente de otros países se pueda beneficiar de esta innovación mexicana”, subrayó.
Este obra cuyo autor es Agencia Informativa Conacyt está bajo una licencia de Reconocimiento 4.0 Internacional de Creative Commons.
