Desarrollan vacuna contra virus del síndrome respiratorio y reproductivo porcino
Por Ana Luisa Guerrero
México, DF. 1 de septiembre de 2015 (Agencia Informativa Conacyt).- Con el propósito de prevenir el contagio del virus del síndrome respiratorio y reproductivo porcino (PRRSV, por sus siglas en inglés) en la producción nacional, científicos del Centro de Investigación y Asistencia en Tecnología y Diseño del Estado de Jalisco (Ciatej) generaron una proteína quimérica que podría sentar las bases para el desarrollo de vacunas eficaces contra las variantes del virus que prevalecen en México.
El doctor Abel Gutiérrez Ortega, responsable del proyecto, explicó que esta proteína fue diseñada con fragmentos estructurales del mismo virus y su eficacia protectora está siendo probada en lechones en colaboración con el Centro de Investigación Disciplinaria en Microbiología Animal del Instituto Nacional de Investigaciones Forestales, Agrícolas y Pecuarias (INIFAP).
En entrevista, el integrante de la Unidad de Biotecnología Médica y Farmacéutica del Ciatej —que forma parte del Sistema de Centros de Investigación del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt) —, señaló que actualmente realizan estudios para hacer el escalamiento en la producción de la proteína quimérica, en el ajuste de la dosis a través de un estudio clínico en lechones y en comprobar su eficacia protectora.
Este proyecto —financiado por el Fondo Sectorial de Innovación Secretaría de Economía-Conacyt (Finnova), a través de la convocatoria de Bonos para la Transferencia y Comercialización del Conocimiento 2014— es relevante debido a que puede ser implementado como un modelo para actualizaciones que se generen en menos de tres meses.
Y es que, detalló, el virus es uno de los agentes infecciosos que más afecta la industria porcina mundial y las vacunas existentes no son del todo eficaces debido a las diferencias antigénicas del PRRSV, que varía de acuerdo con las zonas geográficas.
“Este virus tiene muchas variantes y esto obedece a su material genético y posiblemente a su capacidad de recombinarse. Esto nos genera muchos aislados que no se parecen mucho a la vacuna original, lo que obliga a trabajar en el desarrollo de vacunas subunitarias con un prototipo nuevo y adaptado para una región en específico del país”, dijo.
Gutiérrez Ortega afirmó que este proyecto surge de la preocupación de atender el sector pecuario de Jalisco, pues según el reporte del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), en 2014 se mantuvo como el principal productor de carne de cerdo en el país.
Fue de ahí que la Unidad a la que pertenece vio la necesidad de ofrecer una vacuna contra esa enfermedad porcina que fue descubierta hace 30 años pero que sigue mermando la producción.
Del laboratorio a la granja porcícola
Doctor en Ciencias con especialidad en Ingeniería Genética de plantas por el Centro de Investigación y de Estudios Avanzados (Cinvestav) unidad Irapuato, Gutiérrez Ortega explicó a la Agencia Informativa Conacyt el procedimiento que por medio de técnicas de ingeniería genética diseñó la proteína que contiene secuencias de las proteínas GP3, GP4, GP5 y M del virus, y la produjeron en la bacteria Escherichia coli. Una vez purificada, esta proteína fue reconocida por 36 sueros porcinos tomados en territorio nacional que habían sido identificados como positivos para el PRRSV, y que fueron seleccionados de forma aleatoria.
La investigación titulada Transferencia de una proteína quimérica para la prevención del virus del síndrome respiratorio y reproductivo porcino incluyó pruebas en modelo murino, para lo cual se administraron 10 microgramos de la proteína quimérica mezclados con adyuvante de Freund a ratones BALB/c en un esquema de dos inmunizaciones por vía subcutánea.
El doctor detalló que la respuesta fue muy buena, ya que se indujeron títulos de inmunoglobulina G superiores a un millón, comprobando en esta instancia que contaban con un antígeno que induce una excelente respuesta de anticuerpos.
En la segunda etapa, que pronto iniciará su ejecución, se realizará un estudio en lechones para determinar la eficacia protectora bajo un esquema de inmunización de dos aplicaciones, y después de cierto tiempo se recluirá a los animales inmunizados con un aislado del virus.
La forma de obtener los resultados es esperar la respuesta de los lechones, pues si sobreviven y manifiestan pocos o ningún síntoma se afirma que el antígeno generado es buen candidato para proteger contra la enfermedad. Hasta ahora se cuenta con resultados favorables.
“Esto va avanzando bastante bien, todavía queda pendiente encontrar a alguien que se interese en la tecnología, hemos tenido acercamientos con varias empresas que están esperando los resultados del estudio de la eficacia protectora”, sostuvo.
El investigador apuntó que los datos que arroje esa última etapa les permitirán determinar la eficiencia de la vacuna contra el tipo de virus que prevalece en México, a fin de que las empresas se interesen en adaptar este desarrollo y producirlo.
Esta obra cuyo autor es Agencia Informativa Conacyt está bajo una licencia de Reconocimiento 4.0 Internacional de Creative Commons.