Los viernes de la evolución | La historia genómica de los primeros pobladores de América
EL COLEGIO NACIONAL
Comunicado de prensa
14 de mayo de 2018
- La presencia de Moreno-Mayar es la demostración de que El Colegio Nacional no sólo es un foro para investigadores establecidos, sino que también está abierto a los jóvenes científicos que ya están haciendo un trabajo excepcional: Antonio Lazcano Araujo
- La diversidad genética del DNA mitocondrial en las Américas es un subconjunto de la variabilidad genética en Siberia: José Víctor Moreno-Mayar
- Los nativos americanos son una mezcla de gente del este de Asia y del norte de Eurasia, y la fecha de divergencia de los nativos americanos ocurrió entre 25 mil y 20 mil años atrás: José Víctor Moreno-Mayar
Este viernes 11 de mayo tuvo lugar la conferencia La historia genómica de los primeros pobladores de América en la sede en El Colegio Nacional (ECN), como parte del ciclo de conferencias Los viernes de la evolución, coordinado por los colegiados Antonio Lazcano Araujo y José Sarukhán. La plática fue impartida por el científico mexicano José Víctor Moreno-Mayar, del Centre for GeoGenetics del Museo de Historia Natural de Dinamarca, en Copenhague.
Lazcano Araujo abrió la sesión destacando que Moreno-Mayar es representante de un tipo de biología que se basa en la recuperación y el análisis de DNA antiguo usando métodos informáticos, “una opción que se está desarrollando con mucha rapidez y con resultados excepcionales en muchas partes del mundo”, detalló el colegiado. Lazcano también señaló que la presencia de Moreno-Mayar es “la demostración de que El Colegio Nacional no solo es un foro para investigadores establecidos, sino que también está abierto a los jóvenes científicos que ya están haciendo un trabajo excepcional”.
El origen de los nativos americanos ha dado lugar a hipótesis diversas y controversiales a lo largo de la historia. Tal como apuntó Moreno-Mayar, “la mayoría de las buenas respuestas nos las ha brindado la geología”. Esta disciplina explica que durante la última Edad de Hielo, el norte de América estuvo cubierto por dos glaciares de kilómetros de altura y extensión que imposibilitaban el paso de los primeros nativos americanos desde Alaska hacia regiones de latitud media. Cuando terminó el Último Máximo Glacial (LGM, en sus siglas en inglés), se produjo la apertura de un corredor libre de hielo, que data aproximadamente de 13 mil años de antigüedad, y los primeros nativos americanos que poblaban Alaska en ese momento pudieron descender hacia el resto del continente. Esta teoría se conoce como Consenso Clovis, por el complejo Cultura Clovis, origen de una cultura extendida a lo largo del norte de América durante el mismo periodo.
Desde la perspectiva de la genética, en 2007 se propuso un modelo del poblamiento temprano de las Américas que involucraba una incubación en Beringia, siendo esta región el puente de tierra que estaba expuesto durante la Edad de Hielo y que conectaba Alaska con Siberia. Este modelo está basado en tres observaciones en el DNA mitocondrial en los nativos americanos actuales. “La diversidad genética del DNA mitocondrial en las Américas es un subconjunto de la variabilidad genética en Siberia”, señaló Moreno-Mayar, “sin embargo, a pesar de ser un subconjunto, esta diversidad posee tipos de este genoma mitocondrial que son privados de las Américas, que no se encuentran en ningún otro lugar en el mundo”.
Este modelo propone que hubo una colonización inicial beringia de unos 10 mil años alrededor del Último Máximo Glacial, durante la cual se desarrolló la diversidad genética característica de los nativos americanos de hoy. Al finalizar la Edad de Hielo, estos habitantes primigenios se expandieron de forma veloz, como demuestra la distribución uniforme de este tipo de DNA mitocondrial a lo largo del continente.
Los estudios con DNA nuclear hablan de tres olas de migración provenientes de Siberia para explicar la ancestría genética de los nativos americanos. La primera ola dio origen a la mayoría de los nativos americanos y las posteriores explican el origen de los hablantes del lenguaje NaDene y de los esquimales.
Tal como destacó Moreno-Mayar, gracias a las técnicas de DNA antiguo y la secuenciación masiva se ha logrado un mayor conocimiento del poblamiento inicial de las Américas, pudiendo comparar genomas de restos datados en más de 20 mil años de antigüedad. Dos genomas muy relevantes para entender la divergencia entre los linajes de los nativos americanos del norte y del sur fueron los encontrados en los restos de la granja Anzick y los del Hombre de Kennewick, que demostraron que la diferenciación de los linajes data prácticamente desde el momento de la entrada inicial hacia el sur del hielo.
En 2014, gracias a una colaboración con la comunidad originaria de una población del interior de Alaska, se logró estudiar un individuo del final del Pleistoceno (11.5 mil años de antigüedad) en el sitio de Upward Sun River, nombrado USR1. Comparando USR1 genéticamente con el resto de poblaciones americanas, encontraron que se parecía igual a todas ellas, a excepción de los grupos siberianos o de las migraciones posteriores a la Edad de Hielo. Además, se pudo estimar que el ancestro de los nativos americanos diverge de los siberianos hace 23 mil años, y la divergencia entre los nativos americanos del norte y del sur se produjo de forma posterior al deshielo.
“En conclusión, los resultados de este estudio demostraron que los nativos americanos son una mezcla de gente del este de Asia y del norte de Eurasia, y que la fecha de divergencia de los nativos americanos ocurrió entre 25 mil y 20 mil años atrás”, reveló Moreno-Mayar.
Puede consultar la actividad completa en el canal de YouTube de El Colegio Nacional: https://www.youtube.com/watch?v=qD9P4xGJt2U
Para mayores informes:
Alicia Sandoval Perea, Encargada de prensa y vinculación
Tel. 5789 4330 Ext. 141
El Colegio Nacional
Esta dirección de correo electrónico está siendo protegida contra los robots de spam. Necesita tener JavaScript habilitado para poder verlo.