Emprendedores mexicanos fabrican dron para agricultura
Por Montserrat Muñoz
Guadalajara, Jalisco. 1 de junio de 2016 (Agencia Informativa Conacyt).- La empresa jalisciense Inbright trabaja en la fabricación de un dron de ala fija, enfocado en proveer información relevante aplicado al campo de la agricultura. Esta aeronave no tripulada es capaz de cuantificar las plantas de un cultivo, así como otros factores que ayuden a los agricultores a la toma de decisiones.
A través de un software fabricado por la misma empresa, este nuevo sistema de medición de cultivos puede procesar la información de cinco hectáreas en un lapso de 10 a 15 minutos. Cabe señalar que el modo convencional para obtener esta información es manual, lo cual retrasa los resultados del proceso hasta por semanas.
En entrevista para la Agencia Informativa Conacyt, el ingeniero David Leonardo Castillo Herrera, fundador de la empresa, señaló que con cámaras térmicas e infrarrojas se pueden determinar valores y características del cultivo al momento, cuyo conocimiento puede impactar positivamente en el bolsillo de los agricultores.
“A través de las imágenes obtenidas por el dron, podemos obtener información como qué tan grande es la planta, la distancia entre plantas, los promedios de áreas donde el terreno está más seco y dónde más húmedo. Si hay una plaga, podemos identificar el avance de la plaga basado en el daño que le está haciendo a la planta”, comentó el empresario.
El desarrollo de este dron requirió una inversión de al menos medio millón de pesos y cerca de siete meses de investigación. Estará a la venta a partir de agosto de 2016, con un precio al público que varía entre los 12 mil y 15 mil dólares, dependiendo de las necesidades del cliente. La primera pieza ya fue adquirida por una empresa en San José, California, Estados Unidos, y será utilizada en viñedos.
El director de la empresa valoró la inteligencia y mano de obra mexicana, ya que “toda la manufactura, ensamble, calibración y pruebas se hicieron aquí con equipos mexicanos y conocimiento desarrollado en la empresa. El software nosotros lo hacemos; tenemos computadoras que ponemos dentro del dron, el sistema de control y guía para mover el dron son nuestros. No se ha comprado software de otro lado”, comentó.
Dos tipos de cámaras
Dependiendo de las necesidades del cliente, Inbright ofrece dos tipos de cámaras para el dron de ala fija. La primera es una cámara térmica, que permite recuperar valores de la temperatura del suelo y las plantas, que podría determinar la estrategia de riego de un cultivo.
La segunda cámara es infrarroja y entre la información que puede recopilar está la humedad del suelo y diferentes índices de estrés en la vegetación, como enfermedades o plagas. En general, ambas tienen como objetivo dotar al agricultor de información que devenga en una mayor y mejor producción.
Las imágenes obtenidas por las cámaras son procesadas en un software especializado, que mediante técnicas de visión por computadora arroja las especificaciones de los sembradíos a evaluar.
Al momento, agricultores dedicados a la industria tequilera han mostrado interés en el prototipo, principalmente para hacer el conteo de las plantas de agave con que cuentan. Sin embargo, el principal consumidor de este dron de ala fija podrían ser los consultores dedicados a la cuantificación y diagnóstico de terrenos de cultivo, como lo reconoció Luis Arturo González Casillas, director de Negocios de Inbright.
“Parte del desarrollo de este proyecto conlleva a una modalidad que queremos implementar que es el Drone Service Provider (DSP). Esta es una persona capaz de volar el dron y realizar mapeos de los campos para entregar los resultados que al usuario le interesan. El objetivo es que el agricultor no tenga la necesidad de adquirir un dron, porque a él no le interesa tener el equipo, sino saber cómo está su campo, dónde hay plaga, cómo va la producción, cuánto hay de pérdidas o dónde tiene que regar más”, acotó el ingeniero electrónico.
Asimismo, señaló que una de las ventajas de este sistema es que se busca optimizar el uso de insumos agrícolas. “Lo que se necesita es hacer eficientes los procesos y aumentar su producción; por eso la agricultura de precisión está creciendo en todo el mundo, porque es necesario que en el mismo terreno la producción sea del doble o del triple que era antes, porque la población así lo requiere”.
“Nuestro producto va a ir orientado a ese tipo de empresas y personas, y con él van a poder reducir sus costos y mejorar su precisión. Ellos ya tienen sus clientes, así que el agricultor no tiene que pagar por un dron completo, sino que va a seguir recibiendo el mismo servicio pero ahora más rápido y a un mejor costo”, reconoció Castillo Herrera.
Al respecto, Inbright pretende mantener una relación con los compradores a través de capacitación y actualización del software en caso de requerirse. La capacitación se realiza en menos de una semana y se aprende a volar y a aterrizar el dron, programar las rutas de vuelo deseadas y adjuntar al software las imágenes obtenidas para luego ser procesadas e interpretadas.
Dron de ala fija
Este sistema se conforma por un dron completamente autónomo, fabricado en espuma de poliolefina expandida (EPO, por sus siglas en inglés), el cual es un material resistente y liviano a la vez. La aeronave pesa poco menos de tres kilogramos ya con la cámara integrada.
Este dispositivo está diseñado para tener un tiempo estimado de vuelo de hasta 60 minutos a una altitud de entre 100 y 120 metros, para capturar imágenes de un área determinada previamente mediante geolocalización satelital (GPS).
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