Megadiversidad de peluche en escena

Por Aketzalli González

Ciudad de México. 31 de mayo de 2018 (Agencia Informativa Conacyt).- A través de una campaña cultural de protección de la biodiversidad, la Sociedad Mexicana para la Protección de Especies Prioritarias (SMPEP) coordina el proyecto Los vecinos ocultos, en el cual se presentan obras de teatro de educación ambiental y montan zoológicos de peluche para concientizar a los niños sobre su importancia en los ecosistemas.

El licenciado José Orozco Almanza es fundador de la sociedad y creador de doce obras de teatro que se presentan en diferentes escuelas de la Ciudad de México y en el Museo Nacional de Culturas Populares. Cada puesta en escena es enlazada a un peluche que los niños pueden adquirir.

“Nuestras líneas de acción son la educación, la cultura, la divulgación científica y la investigación para el desarrollo de políticas públicas”, indicó el presidente del proyecto.

Los peluches elaborados por los miembros del grupo son figuras basadas en animales endémicos del Valle de México. Cada juguete respeta las características morfológicas del organismo y va acompañado de una ficha técnica.

Además, hay acceso abierto al portal web en el que pueden consultarse los eventos del proyecto y datos curiosos sobre el organismo.

“El peluche trae un audiolibro con toda su historia natural, cultural y de otras especies de la biodiversidad. También pueden encontrar publicaciones científicas. Es un libro abierto que todos los días crece y tiene una sorpresa”.

Asimismo, las personas que adquieren el juguete tienen acceso gratuito a las cuatro obras de teatro que se presentan en todo el año en el Museo de Culturas Populares.

El peluche adoptado contempla que el público valore y conozca la vida silvestre, con el fin de reducir la compra ilegal de fauna silvestre.

“Llevamos un año y hemos presentado cerca de cien funciones, con una población de cinco mil personas beneficiadas”, señaló.

Vecinos ocultos

“Queremos que el ajolote mexicano, el conejo zacatuche y muchas especies más de la Ciudad de México sean conocidas en el mundo, para que el mundo nos ayude a conservarlas”, comentó José Orozco.

A partir de personajes carismáticos, la SMPEP se basa en la creación de ficciones relacionadas con la historia cultural de México.

“Yo tengo mi propia historia del ajolote que se llama El origen del monstro del agua, es una historia padrísima en donde el ajolote está descansando en Xochimilco, y en ese momento llega la diosa de la muerte. La estrené en el Museo de Culturas Populares y hubo quinientas personas”.

El proyecto enfocó sus primeras actividades en el ajolote, por considerarlo una especie emblemática de la Ciudad de México. El licenciado José Orozco lo llama un vecino oculto y recalcó que es de vital importancia rescatar la especie, que se encuentra en peligro de extinción.

“Los ajolotes están en ciertos refugios, viven en el lodo y es muy poco probable que los podamos ver. Hay menos de setecientos ajolotes. Se dice que hay menos de diez ajolotes por kilómetro cuadrado de agua, cuando hace diez años había seis mil ajolotes por kilómetro cuadrado de agua”.

El homenaje al ajolote consistió en hacerlo peluche, una réplica exacta de la especie que contempla sus características morfológicas, como los cinco dedos de las patas traseras, los cuatro dedos de sus patas delanteras, su aleta dorsal superior, sus hendiduras branquiales, su cabeza plana y la cola.

Especies de peluche

En el planeta existen más de diez millones de especies, y los científicos solo han podido registrar 1.8 millones. Sin embargo, algunos estudios sugieren que la cifra podría incrementar con la descripción de nuevas especies.

Desde el punto de vista biológico, México es un país megadiverso gracias a su historia geológica y clima. Su superficie terrestre representa el 1.5 por ciento de la superficie del planeta, en la cual habita doce por ciento de las especies del mundo.

“Eso quiere decir que de cada cien especies que tiene el planeta, México tiene doce, y eso es maravilloso, porque ocupamos el quinto lugar a nivel mundial. Deberíamos ser uno de los países más atractivos, una potencia en el mundo natural”, señaló José Orozco. 

El creador de las obras de teatro indicó que en la Ciudad de México habitan 22 millones de personas. Una ciudad con suelo de conservación, y por el crecimiento de la mancha urbana se ha perdido la riqueza de los ecosistemas.

“Hemos desaparecido la mitad de las especies que tenemos. Lamentablemente niños que ahorita tienen tres o cuatro años ni siquiera conocen el pájaro carpintero imperial y ya está extinto”, comentó.

El nombre de Vecinos ocultos surgió como metáfora a la cercanía que tenemos con los organismos endémicos del Valle de México. La urgencia de crear campañas para conservar la biodiversidad es de vital importancia, ya que existen pocos esfuerzos enfocados en educación ambiental, recalcó José Orozco.

“Yo quisiera resaltar que no hay una sola campaña de divulgación y de información sobre la importancia del suelo de conservación. Eso hace que no conozcamos la riqueza de la ciudad, que no la valoremos y no tengamos identidad con nuestro territorio. Por eso nos da lo mismo si se tira o no basura, nos da lo mismo si se ensucia un canal o no, nos da lo mismo si se quema un bosque,” concluyó.

 

 

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