Desarrolla el Centro de Investigación en Química Aplicada (CIQA) almidón termoplástico (ATP)
- El ATP es una alternativa para reducir la utilización de polímeros provenientes de petróleo.
- Con la producción de materiales, basados en ATP, se pueden fabricar productos, como bolsas de supermercado, botellas y envases para champú o agua.
Por Lizbeth Serrano
México, D. F. a 8 de mayo de 2014 (AIC).- Con el objetivo de disminuir el uso de plásticos derivados del petróleo y reducir el carbono contenido en materiales hechos con PET (politereftalato de etileno, plástico usado en la producción de envases y botellas) científicos del Centro de Investigación en Química Aplicada (CIQA) del CONACYT trabajan en la elaboración de un almidón termoplástico que ayude a reducir la utilización excesiva de plásticos tradicionales.
En nuestro país, empresas como Resirene tiene a disposición comercial una gama diversa de productos fabricados con almidón termoplástico.
Francisco Javier Rodríguez González, doctor e investigador del Departamento de Procesos de Transformación de Plásticos del CIQA, en Coahuila, comentó que un problema derivado del uso excesivo de plásticos es el incremento de desechos de este material que terminan en los tiraderos de basura.
“Por su naturaleza inerte, la mayor parte de los residuos plásticos sólidos no contaminan la tierra. Sin embargo, pueden afectar a animales terrestres o marinos, cuando éstos ingieren accidentalmente dicho polímero”, indicó el experto.
Como una alternativa para reducir la utilización de polímeros provenientes de petróleo, fuentes renovables, como el almidón termoplástico, son una opción viable.
El investigador del CIQA explicó que el almidón es un carbohidrato usado por las plantas, como almacén depósito de energía, el cual se guarda en forma de gránulos dentro de las semillas, tallos, raíces y hojas. Ya en el interior, se forman cadenas de almidón que serán sometidas a un proceso de cocción para que sus moléculas puedan ser asimiladas por el organismo. Luego de este procedimiento, el almidón obtenido es usado como base de muchos alimentos, como el pan, las tortillas y las pastas para sopas.
“Si lo que se pretende es trasformar el almidón en un material plástico, el proceso para lograrlo tiene una gran similitud con el método de cocimiento de la comida. Tal como se elaboran alimentos procesados, el almidón es introducido a un equipo denominado extrusor, donde, con agua, glicerina, energía mecánica y calor, obtenemos almidón termoplástico (ATP)”, detalló Rodríguez González.
De acuerdo con el investigador, el almidón termoplástico es altamente sensible a las condiciones ambientales, en especial a la humedad. Por tal motivo, el ATP debe ser mezclado con plásticos sintéticos, como el polietileno (PE), poliestireno (PS) y poliésteres degradables (PEsB).
Empresas como Biotec México, Cereplast, Cardia Bioplastics, Resirene, Biop, Futuramat, Grabio, entre otras, representan el sector productor y comercial de materiales derivados de almidón termoplástico.
“Con los materiales generados por estas empresas, basados en ATP, se pueden manufacturar productos tan diversos como película para bolsas de supermercado, botellas y envases para champú o agua, así como espumas para empaque de piezas frágiles, entre muchos otros artículos”, dijo el especialista.
En México, la empresa Resirene tiene disponible, a nivel comercial, materiales sustentables preparados con almidón termoplástico. “En nuestro caso, el CIQA ofrece la posibilidad de desarrollar productos a la medida a partir de ATP”, agregó el doctor.