Unidad de Investigación en Enfermedades Metabólicas
Por Carmen Báez
Ciudad de México. 23 de marzo de 2017 (Agencia Informativa Conacyt).- Concebido en sus orígenes como una instancia de respuesta especializada a las necesidades de la salud de la población en materia de nutrición y medicina interna, hoy el compromiso del Instituto Nacional de Ciencias Médicas y Nutrición Salvador Zubirán (INCMNSZ) se fortalece con la investigación de punta que realiza.
Recientemente, el INCMNSZ, en colaboración con la Escuela de Medicina y Ciencias de la Salud del Tecnológico de Monterrey, puso en marcha la Unidad de Investigación en Enfermedades Metabólicas, única en su tipo en México.
La relevancia de este espacio, en donde convergerán la investigación médica y la formación de recursos humanos especializados en el tema, resulta de la problemática actual en materia de salud pública. Y es que en su conjunto, las enfermedades metabólicas, en las que se incluyen la obesidad, la diabetes y el síndrome metabólico, se han convertido en la epidemia de este siglo en México y el mundo.
Las enfermedades metabólicas, define la enciclopedia médica, “son aquellas que interfieren en los procesos bioquímicos del organismo involucrados en el crecimiento y conservación de la buena salud de los tejidos orgánicos, en la eliminación de productos de desechos y en la producción de energía para llevar a cabo las funciones corporales”.
De acuerdo con Carlos Alberto Aguilar Salinas, investigador del INCMNSZ, el tema de las enfermedades metabólicas es uno de los más competitivos en materia de investigación, pues tan solo en 2016 a nivel internacional se publicaron poco más de 11 mil 
artículos relacionados con estos padecimientos, mientras que en México fueron 129 artículos. “Mucho debido a la complejidad de los estudios que se requieren”, dice.
Estudiar la población mexicana
Es por ello que la Unidad de Investigación en Enfermedades Infecciosas, ubicada dentro de las instalaciones del INCMNSZ, tiene entre sus objetivos conocer las características de la población mexicana que expliquen su susceptibilidad para presentar enfermedades metabólicas.
Respecto a ello, Alberto Aguilar Salinas, doctor en investigación médica, destaca que México es uno de los países que presenta mayor susceptibilidad para el desarrollo de las enfermedades metabólicas, además de ser la nación con una de las prevalencias más altas de diabetes.
“Identificar los mecanismos que vigilan estas peculiaridades no se hará en el extranjero. La investigación debe hacerse en nuestro entorno y con recursos propios. Las enfermedades metabólicas en México aparecen en edades tempranas, lo cual implica en el sistema de salud. No se requiere tener un elevado índice de masa corporal para presentar estas enfermedades como sucede en las poblaciones caucásicas. Como un modelo único, interactúan con enfermedades infecciosas, lo cual no sucede en otras latitudes. Tenemos que ser innovadores y tomar las peculiaridades de los usuarios como una fortaleza para generar evidencia científica”, explica.
Instalaciones de primer nivel
Equipada con tecnología de punta, la Unidad de Investigación en Enfermedades Metabólicas cuenta con laboratorio de ejercicio, adecuado para la medición de la actividad física; laboratorio de evaluación de la función vascular para calcular la velocidad del pulso y la respuesta vascular a diversos estímulos; laboratorio de composición corporal para la medición del contenido de grasa corporal y por regiones, así como la densidad mineral ósea. Lo anterior en condiciones controladas y en manos de personal especializado.
Aquí, señalan los especialistas del lugar, se llevarán a cabo estudios con calidad y seguridad para cuantificar la composición corporal del paciente, su respuesta a diferentes estímulos fisiológicos, y para el desarrollo temprano de medicamentos.
La unidad, diseñada para que todas estas intervenciones puedan realizarse en el mismo lugar a un bajo costo, comodidad y seguridad del paciente, cuenta también con una cocina metabólica, para intervenciones basadas en la modificación de la alimentación.
Magdalena Sería, que forma parte del equipo de especialistas de la unidad de investigación, señala que en este espacio se prepararán los alimentos que los pacientes consumen durante los protocolos de investigación, con el objetivo de evaluar el metabolismo posprandial, es decir, el estado fisiológico inducido por la ingesta de alimentos.
“También buscamos evaluar la respuesta metabólica hormonal a ciertos alimentos, así como el efecto de ciertos micro y macronutrimentos en situaciones agudas, contamos con instrumentos de medición que nos ayudan a ser más precisos en todos los ingredientes”, explica.
A su vez, Lizeth Gómez Munguía, maestra en ciencias de la salud y encargada del área de infusión —otro de los complementos de la unidad de investigación—, explica que ahí se realizan pruebas de estimulación o inhibición con medicamentos u hormonas que requieran muestreos por periodos prolongados. Entre otras cosas, se observa si un medicamento o indicación terapéutica es adecuado para su administración en el paciente.
“Medimos la cantidad exacta de la dosis (de medicamentos) que se requiere administrar, evaluamos cantidad, reacción y reciprocidad de la sustancia, carga a la insulina, y también observamos cómo funciona el cuerpo de un paciente en el consumo de grasas: por ejemplo, no es lo mismo para una persona que come una hamburguesa y hace ejercicio a aquella que no realiza actividad física, o tiene antecedentes genéticos de colesterol, dislipidemia”, comparte.
A decir de la especialista, medir la reacción del paciente de los elementos antes mencionados permite realizar estudios más específicos. “Dependiendo de la naturaleza del protocolo de investigación, son los estudios que realizamos”.
Componentes genéticos, crucial en el desarrollo de las enfermedades metabólicas
Carlos Aguilar Salinas, también titular de la Unidad de Investigación en Enfermedades Metabólicas, resalta que diversos grupos de investigación, entre ellos el del INCMNSZ, han podido demostrar que la etnicidad amerindia se asocia con algunos alelos de actividad que son propios de la diabetes tipo 2 e hígado graso, por lo que en este espacio se está tratando de conocer los mecanismos por los cuales algunas variantes genéticas son precursoras de las enfermedades metabólicas más comunes.
“En especial estamos investigando una enfermedad que pensamos causa inmunidad genética, que se caracteriza por tener triglicéridos, el paciente que la porta puede padecer enfermedad cardiovascular y eventualmente diabetes. Parece ser que es propia de la población mexicana y estamos en el proceso de saber cómo determina la aparición de este padecimiento, hipertrigliceridemia”, dice. Se trata de un estudio genético cuya finalidad es determinar cuáles son las variantes genéticas asociadas a esta patología.
En este contexto, en la Unidad de Procedimientos Menores —que también forma parte de este espacio de investigación— se llevan a cabo biopsias de tejidos para su investigación a fin de conocer su morfología y expresión genética.
La idea de obtener el material genético del tejido es generar información adicional de la que ya se tiene de las muestras de sangre. “Hacemos un escrutinio y criterios de inclusión, evaluamos portadores de un gen que aumenta la susceptibilidad a diabetes, y también la contraparte, a sujetos no portadores de ese gen con el fin de tener otro panorama”, explica Ivette Cruz Bautista, maestra en ciencias médicas y encargada de la Unidad de Procedimientos Menores.
Respecto a la relevancia de esta unidad, Alberto Aguilar Salinas, también miembro nivel III del Sistema Nacional de Investigadores (SNI) señala que los trabajos realizados en la unidad de investigación permitirán crear las evidencias científicas requeridas para el avance en el entendimiento y tratamiento de dichos padecimientos en el país, así como en la generación de nuevos tratamientos para los pacientes. Entre otros objetivos, este espacio pretende ser un centro de excelencia en el entrenamiento de investigadores especializados en el tema.
“Con todos estos recursos debemos convertirnos en un catalizador. Difícilmente existe una unidad como esta en las instituciones (del país). Queremos poner al alcance estos equipos en manos de investigadores entrenados para llevar a cabo este tipo de estudios, para generar preguntas o fortalecer sus estudios. Es una unidad de prestación de servicios para todo aquel interesado en el tema”, concluye el investigador.
Adicionalmente, este espacio será sede de un programa de posgrado diseñado para capacitar investigadores especializados en el estudio de la diabetes, la obesidad y los problemas relacionados.
Ver texto en pdf.
Esta obra cuyo autor es Agencia Informativa Conacyt está bajo una licencia de Reconocimiento 4.0 Internacional de Creative Commons.
