Nuevo tratamiento celular que restaura la piel dañada por quemaduras
Por Armando Bonilla
México, DF. 2 de septiembre de 2015 (Agencia Informativa Conacyt).- Dos de las afecciones más graves y delicadas en la piel, considerado el órgano más grande en los seres humanos, son las relacionadas con quemaduras —donde la población más afectada es la infantil— y las que derivan de la diabetes, principalmente el pie diabético.
En relación con el primer padecimiento, el Instituto Nacional de Rehabilitación (INR), que resguarda el banco de piel más importante del país, señala que en México se reportan aproximadamente 114 mil accidentes por quemaduras, de los cuales más de 11 mil ocurren en el Distrito Federal.
Respecto a la segunda enfermedad, la Secretaría de Salud (SSA) reporta que la diabetes afecta un promedio de habitantes que va de los 6.5 millones a los 10 millones de personas; asimismo, que hasta 30 por ciento de los casos que presentan pie diabético deriva en amputación.
Lo anterior se señala porque un grupo multidisciplinario de investigación que incluye al sector productivo e instituciones de salud, así como a miembros de la Asociación Mexicana de la Ciencia de los Animales de Laboratorio, desarrolló un nuevo tratamiento para regenerar la piel afectada por quemaduras y complicaciones del pie diabético, entre otras enfermedades.
En entrevista con la Agencia Informativa Conacyt, el biólogo Ricardo Rangel Martínez, director general del Centro Biotecnológico de Terapias Avanzadas, explicó que se trata de un novedoso bioandamio generado a partir de células madre adultas obtenidas de diversas fuentes tisulares, en particular de vellosidades coriónicas de la placenta humana.
El bioandamio celular
“Lo que básicamente hacemos es aislar lo que llamamos célula madre o célula troncal mesenquimal, la cual también se puede obtener de tejido endometrial. Con estas células estamos fabricando, por medio de ingeniería tisular o ingeniería de tejidos, un bioandamio —una especie de piel artificial— que es colocado en las heridas de personas que han sufrido quemaduras y ulceraciones producto de accidentes u otros males como el pie diabético”, explicó.
Asimismo, añadió que este desarrollo puede aplicarse prácticamente a cualquier herida en la estructura o arquitectura natural de la piel. El desarrollo de esta nueva tecnología, dijo, se inició hace casi tres años y actualmente se encuentra en la etapa de pruebas clínicas a través de un protocolo en el Hospital Central Sur de Alta Especialidad de Pemex, el cual está a cargo de los doctores Cuauhtémoc Márquez Espriella y Paulo González Martínez.
La evolución de la investigación
“El bioandamio surge como una alternativa muy importante a lo que actualmente existe porque es un desarrollo de disponibilidad inmediata, es decir, nosotros podemos construir un andamio en menos de cinco o seis horas para cubrir más de 90 por ciento de la superficie corporal de una persona que haya sufrido una quemadura, el cual se aplicaría de manera inmediata”, dijo Rangel Martínez.
Explicó que el tratamiento actual consiste en la toma de biopsias del propio paciente, del cual se genera un tratamiento; no obstante, este proceso tarda hasta quince días y el tratamiento generado se aplica de manera muy limitada y con resultados también muy cuestionables.
La fase preclínica en modelos animales
- Modelo de laboratorio con cerdos
Una vez que se tuvo listo el bioandamio comenzaron las pruebas preclínicas con distintos modelos animales, dijo Rangel Martínez, quien precisó que dichas pruebas fueron realizadas bajo la regulación y supervisión del Consejo de Bioética correspondiente, así como la Asociación Mexicana de Ciencia de los Animales de Laboratorio.
Detalló que las primeras pruebas se llevaron a cabo con cerdos, a los cuales se les hizo una quemadura para después colocar el bioandamio. Dicha evolución se comparó con un grupo testigo, al cual se le aplicó otro tipo de apósito, tratamientos utilizados actualmente por el sector salud.
“Se realizó este estudio pareado del bioandamio contra el apósito ya existente y al cabo de una semana se obtuvieron biopsias que fueron enviadas a un laboratorio para ser procesadas y que se realizaran estudios histológicos. Esta medición se efectuó a través de un tercero para evitar cualquier tipo de sesgo en los resultados”.
En el análisis de los resultados, trascendió que el porcentaje de efectividad del bioandamio contra el apósito ya existente es notablemente mayor. “Se detectó una mejoría muy importante y sustancial en la capacidad de restauración de las heridas en el corto tiempo”.
- Pruebas con perros lastimados
La directora comercial de Alternativas Biomédicas y Regenerativas, Grisel Adriana Pérez González, en entrevista con la Agencia Informativa Conacyt, explicó que posterior a la prueba de laboratorio con cerdos, el producto fue probado también en la línea veterinaria a través de perros que sufrieron algún accidente o diversas lesiones en la piel.
“Tuvimos el caso de un perrito que sufrió una quemadura por un medicamento, lo grave es que la quemadura era interna, es decir, se originó adentro y llegó hasta la parte exterior de la piel. Con el bioandamio logramos reparar todas las capas de la piel. Incluso, el perrito recuperó el pelo casi en su totalidad”.
Añadió que durante este tratamiento experimental se contó con la colaboración de especialistas en el área de veterinaria de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM). “Lo que sucedió es que se logró la restauración de la piel, pero también con sus anexos, esto es, crecimiento de pelo y sensibilidad”.
Prueba clínica en el hospital de Pemex
En la etapa de investigación actual, el tratamiento con el bioandamio es aplicado a pacientes con quemaduras y también con pie diabético en el Hospital de Pemex. “En el caso del pie diabético, se trata de pacientes a los cuales la medicina actual ya no los puede ayudar en consecuencia a lo avanzado de sus lesiones, siendo la única opción para ellos la amputación”, dijo Rangel Martínez.
Detalló que tras ser tratados con el bioandamio se ha logrado rescatar el tejido. “Hemos logrado recuperaciones dramáticas en periodos muy cortos de tiempo, básicamente en cuarenta días hemos logrado restaurar pies que iban a ser cortados, prácticamente hasta su arquitectura natural”.
Para el biólogo, una de las grandes bondades del bioandamio radica en que se trata de un tratamiento universal, en el cual no es necesario que exista compatibilidad genética entre el receptor y las células madre. “Este tratamiento ya no se supedita o se limita a que la gente sea histocompatible, es decir, que compara moléculas compatibles para que la célula sea aceptada”.
Al respecto, precisó que independientemente de dónde se obtenga la célula, de la placenta o el tejido endometrial, esta célula no se rechaza, por el contrario, crea sus propias reglas inmunológicas y lleva a cabo un proceso de desinflamación que produce un efecto de inmunotolerancia que le permite aplicarse de manera universal.
Respecto a las pruebas realizadas al momento en pacientes humanos, Rangel Martínez señaló que de 100 por ciento de los casos tratados, 100 por ciento ha reportado beneficios significativos. “Se ha logrado entre un 90 y un 100 por ciento de restauración”.
¿Cómo se aplica el tratamiento?
A pregunta expresa de cómo se aplica el tratamiento, el biólogo Rangel Martínez explicó que lo primero es conseguir una fuente de células, es decir, donadores sanos, a quienes se les realiza un estudio de perfil genético para evitar a aquellas personas con familiares en línea directa que padecen o padecieron enfermedades como el cáncer u otras transmisibles mediante la sangre.
“Una vez que se cuenta con el donador óptimo, se extrae la célula y se aísla la célula madre, la célula troncal. Después de ser aislada, es sometida a un proceso de expansión celular, es multiplicada hasta obtener una dosis apropiada (2 a 3 millones de células por kilogramo de peso), en ello radica la importancia de la expansión celular”, señaló.
Detalló que el siguiente paso consiste en cosechar las células, lo cual se hace a la par de los estudios clínicos del paciente. “Las células pueden aplicarse vía intravenosa mediante una venoclisis, o directamente sobre la herida, que es el caso del bioandamio, es decir, un apósito sobre la herida”.
En el caso del pie diabético es necesario tomar en cuenta algunas consideraciones como la desinfección de la herida, verificar que no exista necrosis, para lo cual se realiza una debridación para que pueda llevarse a cabo el proceso regenerativo de manera apropiada.
Para otras heridas, dijo, existe otro tipo de aplicaciones, por ejemplo, vía intraarticular en el caso de artrosis de rodilla. “En este caso las células se preparan colocándolas en un medio rico en factores de crecimiento y se inyecta directamente en la cápsula articular”.
Respecto a los procesos de aplicación, el especialista dijo que las células utilizadas tienen la capacidad de poderse diferenciar de las células del tejido en el cual se colocan. “La célula recibe señales de reprogramación nuclear, por así decirlo, entonces la célula queda a merced del nicho al cual se colocó y comienza un proceso regenerativo”.
*Fuente: Dr. Paulo César González Martínez, 2016, “Una alternativa al tratamiento de quemaduras de espesor parcial mediante el empleo de un novedoso substituto dérmico, construido con un bioandamio bioabsorbible y células madre mesenquimales aisladas del tejido endometrial a través de un nuevo método”, Tesis de posgrado, UNAM, México.
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