¿Quieres donar tu cuerpo a la ciencia?
Boletín de prensa
8180/2018
Ciudad de México. 9 de octubre de 2018 (Agencia Informativa Conacyt).- Cuando cursaba la preparatoria, Laura Echeverría solía bromear sobre la muerte con su familia. Ella y sus hermanos estudiaban en la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) y desde entonces la joven tenía tanto aprecio y respeto por su universidad que entre risas decía: "Cuando me muera voy a donar mi cuerpo a la UNAM, para que los estudiantes de medicina no anden penando por cuerpos". Hace ocho meses, Laura se inscribió formalmente en el Programa de Donación de Cuerpos de la institución.
En China, Laura sería conocida como una maestra silenciosa, una persona que después de su muerte permite a los estudiantes practicar un trasplante de riñón, antes de realizar el procedimiento en un paciente vivo, o hace posible a un grupo de investigadores conocer la anatomía de un hígado graso.
Los maestros silenciosos regalan conocimiento y a la vez regalan vida, pues los jóvenes médicos podrán operar con mayor seguridad si practican en un modelo tan parecido a lo que encontrarán en la sala de cirugía de un hospital.
Por fortuna, Laura no es la única maestra silenciosa en México, mil 430 personas decidieron donar sus cuerpos al morir y están inscritas en el Programa de Donación de Cuerpos de la UNAM.
Esta es una cifra esperanzadora, considerando que el programa inició hace dos años con 27 donadores inscritos, explica Diego Pineda Martínez, jefe del Departamento de Anfiteatro de la Facultad de Medicina de la UNAM y responsable del proyecto.
AN/AT/FV/8180/2018