Ricardo Tapia: sensibilidad y compromiso en la ciencia
Boletín de prensa
836/2015
México, DF. 3 de septiembre de 2015 (Agencia Informativa Conacyt).- El progreso del país no puede darse si no hay ciencia y tecnología; esto solo se puede lograr a base de investigación y de formación de nuevos investigadores, advierte Ricardo Tapia Ibargüengoytia.
Investigador emérito del Sistema Nacional de Investigadores (SNI) y de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), Tapia Ibargüengoytia es hijo y nieto de ilustres médicos. Los tres, de igual nombre y con la misma pasión por la ciencia, han sido reconocidos como miembros de la Academia Nacional de Medicina de México.
Con cierto dejo de modestia, Tapia Ibargüengoytia asegura que haber sido docente, siendo aún estudiante, o el primer doctor en Bioquímica graduado en 1969 en la UNAM, fue simplemente por coincidencia cronológica.
Tuvo desde muy joven la facultad para la docencia; cuando se recibió de médico, en 1963, ya estaba involucrado en la investigación y tenía más de tres años asistiendo al laboratorio del doctor Guillermo Massieu Helguera, gracias a que en el segundo año de la carrera conoció a Alberto Guevara Rojas, su profesor de fisiología y “distinguidísimo médico”, quien le habló de la investigación científica y con quien posteriormente estrechó una amistad.