Arqueoastronomía de la zona maya
Boletín de prensa
2100/2016
Mérida, Yucatán. 11 de marzo de 2016 (Agencia Informativa Conacyt).- La arqueoastronomía puede entenderse como el punto de intersección entre la ciencia dura representada por la astronomía y el mundo del conocimiento de las humanidades, la historia, la arqueología, la antropología, la lingüística y la historia del arte. Aunque tiene sus antecedentes en el siglo pasado, su forma actual surge en los años cincuenta a partir de las preguntas generadas en relación con el significado astronómico de las orientaciones que se encuentran en las construcciones megalíticas europeas, como el santuario Stonehenge, en Inglaterra.
En México, las más de dos mil 500 zonas arqueológicas estudiadas y tantas otras no estudiadas son los puntos de observación para investigadores provenientes de distintas disciplinas, como es el caso del físico astrónomo Jesús Galindo Trejo y el arqueólogo Ismael Arturo Montero García, quienes han desarrollado diversas metodologías de estudio alrededor de estructuras prehispánicas de Mesoamérica. En el marco de la Ceremonia de Clausura del Año Internacional de la Luz en México, ambos investigadores compartieron escenario para exponer sus hallazgos en torno a la arqueoastronomía de la zona maya.
Para Jesús Galindo Trejo, la disciplina arqueoastronómica se encuentra en la mitad del camino entre la ciencia y la cultura, pues el ser humano no siempre deja su información con claridad, sino que suele ser incompleta, contradictoria y, en ocasiones, no existe. "La arqueoastronomía no es una disciplina que llegue necesariamente a propuestas contundentes como algunos entusiastas suponen, porque no estuvimos ahí, siempre existe una posibilidad de que no sea como se considera. Pero si uno se basa en algo verificable como el cielo, en un estudio arqueológico serio que recupere información fidedigna, la probabilidad de que la propuesta sea real es alta", comentó en entrevista con la Agencia Informativa Conacyt.
MN/AT/FV/2100/2016