Juan Carlos Mateos, química al servicio de la biotecnología
Por Montserrat Muñoz
Guadalajara, Jalisco. 1 de marzo de 2017 (Agencia Informativa Conacyt).- El área de Biotecnología Industrial del Centro de Investigación y Asistencia en Tecnología y Diseño del Estado de Jalisco (Ciatej), trabajó tan solo en 2016 en más de 60 proyectos de investigación y servicios a la industria.
Liderando los esfuerzos de este grupo constituido por 14 investigadores, está el doctor Juan Carlos Mateos Díaz. En entrevista para la Agencia Informativa Conacyt, el doctor platicó respecto a su quehacer dentro del centro de investigación, así como del futuro del área que hoy dirige.
El investigador comenzó su preparación como ingeniero químico en la Universidad de Guadalajara, tras lo cual el joven emigró a Francia para continuar sus estudios en la Universidad de Aix-Marsella con una maestría y doctorado en química molecular y moléculas bioactivas. Para ello recibió apoyo de becas por parte del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt).
Para sus investigaciones, Mateos Díaz trabajó sobre una colección mexicana de hongos termófilos —que proliferan en altas temperaturas—. Dedicó sus años de maestría y doctorado a encontrar métodos de búsqueda y selección de lipasas en estos hongos termófilos con aplicaciones tecnológicas.
A pesar de contar con oportunidades para complementar su preparación académica en el viejo continente con un posdoctorado, el investigador decidió regresar a su patria.
“Siempre en mi mente tuve la idea de regresar a México, nunca pensé quedarme allá. Sentía un compromiso por regresar y hacer algo por el país, todos los conocimientos adquiridos aplicarlos y transmitirlos acá”, señaló.
Al regresar, ingresó durante algunos meses como catedrático en la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM), unidad Iztapalapa, para luego incorporarse al grupo de investigadores del Ciatej.
Dr. Juan Carlos Mateos Díaz Ingeniero químico de la Universidad de Guadalajara, cuenta con maestría y doctorado en química molecular y moléculas bioactivas, cursados en la Universidad de Aix-Marsella, Francia. Desde 2006 se integró como investigador al área de Biotecnología Industrial del Centro de Investigación y Asistencia en Tecnología y Diseño del Estado de Jalisco (Ciatej), misma de la cual es responsable desde 2016. Su principal línea de investigación es el aislamiento de cepas microbianas productoras de lipasas y esterasas, buscando aplicarlas en la obtención y modificación enzimática de compuestos bioactivos de alto valor agregado. Miembro nivel I del Sistema Nacional de Investigadores (SNI). “En uno de los primeros proyectos que tuve aquí en Ciatej estuvimos buscando lipasas para separar antiinflamatorios esteroidales racémicos para tratar de tener procesos donde se pueden producir aquellos que tienen mayor actividad, hasta 600 veces mayor actividad en algunos casos”, recordó el miembro nivel I del Sistema Nacional de Investigadores (SNI).
La vocación viene de familia
Criado en una familia donde ambos padres se dedicaron a la ingeniería química, no resultó difícil para el joven Mateos Díaz elegir un camino profesional. Según lo cuenta, la motivación e interés por entender los diferentes fenómenos de la vida es algo que heredó de sus padres y que incluso comparte también con su hermano menor, quien al momento está terminando un doctorado en Francia también en química.
“Desde pequeño sentí curiosidad de entender cómo funcionan las cosas y sobre todo cómo funciona la vida. Toda la familia se dedica a la ciencia, ahí nos enseñaron a maravillarnos de la vida”, compartió el entrevistado.
La investigación continúa siendo protagonista ahora en su faceta como padre y hombre de familia, ya que su esposa es investigadora en temas sociales y antropológicos. Respecto a cómo logra compaginar su trabajo con su vida personal, el doctor acotó que existe una comprensión por parte de su familia respecto a los ritmos que conlleva dedicarse a la investigación. Sin embargo, señaló que para él es prioritario dedicar tiempo a su hija, de apenas año y medio de edad.
En sus tiempos libres, el doctor Mateos Díaz gusta de viajar, leer y caminar, así como hacer paseos en parques y bosques.
Proyectos de investigación
Desde los estudios de maestría y doctorado, el investigador se ha dedicado a trabajar ampliamente en las lipasas y sus aplicaciones en la industria. “Las lipasas son proteínas que producen distintos microorganismos que ayudan a digerir las grasas. Son proteínas cuya actividad rompe las grasas en los componentes más sencillos para que sean asimilables, tanto por humanos como por microorganismos”, comentó.
Los usos de las lipasas son variados: son utilizados en fármacos para prevenir la obesidad y promover la hidrólisis de las grasas, así como en detergentes enzimáticos o lavavajillas, por ejemplo.
“Las lipasas también tienen aplicaciones mucho más interesantes para la síntesis de fármacos. No nada más actúan sobre las grasas sino que pueden ayudarnos a hacer fármacos mucho más potentes”, añadió.
Al momento, el doctor Mateos Díaz colabora en al menos cuatro proyectos con colegas del Ciatej y tiene a su cargo cinco estudiantes de posgrado. Su actividad dentro del centro de investigación le ha significado publicar más de 30 artículos científicos y capítulos de libro, así como registrar ocho patentes.
Uno de los proyectos en los que trabaja se refiere al aprovechamiento del nejayote —residuo de la industria de la nixtamalización— para obtener ácido ferúlico y productos de alto valor agregado para producir antifúngicos y cosméticos, entre otros. Asimismo, colabora con la Unidad de Biotecnología Vegetal del centro de investigación para crear bioinsecticidas y biofungicidas a partir de procesos fermentativos.
Como responsable del área de Biotecnología Industrial, el doctor señaló que este año se planea abrir una nueva línea de investigación dedicada a la biología sintética, para complementar las ya existentes de biocatálisis y fermentaciones.
“La idea de la biología sintética es utilizar microorganismos como biofábricas para que puedan producir algún metabolito de interés industrial con aplicaciones en farmacéutica, agroindustria o alimentos funcionales”, acotó.
Catedrático
Aunque el doctor confesó que en un principio no le gustaba dar clases, poco a poco esta actividad comenzó a crecer dentro de él, al darse cuenta del compromiso que implica formar a las próximas generaciones.
“(En el salón) es donde yo puedo transferir todos esos conocimientos que adquirí y que sigo adquiriendo con ellos y es además una manera de mantenerse actualizado”, añadió el catedrático, que al momento suma alrededor de 30 tesis de posgrado como director o asesor.
Algunas de las clases que ha impartido a lo largo de los años en los diferentes programas de posgrado de Ciatej, así como en conferencias magistrales en distintas universidades, se refieren a la fermentación en medio sólido, biocatálisis, microbiología, bioquímica y bioprocesos.
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