Impulsa Alemania Modelo Mexicano de Formación Dual
Por Hugo Valencia
Ciudad de México. 13 de octubre de 2016 (Agencia Informativa Conacyt).- El Modelo Mexicano de Formación Dual (MMFD) orientado al sistema alemán es un nuevo esquema que plantea la formación de capital humano tanto en la escuela como en la empresa; este modelo se aplica desde hace tres años en algunas instituciones públicas de educación media superior (IPEMS). La iniciativa tiene como objetivo incrementar el número de jóvenes bien capacitados en beneficio de la industria mexicana.
En el 2013, la Secretaría de Educación Pública (SEP), junto con la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex) y la Cámara Mexicano-Alemana de Comercio e Industria (Camexa), lanzó un proyecto piloto para la implementación de un modelo de formación dual por primera vez en el país.
Dr. Klaus-Dieter-Przyklenk.En ese sentido, la Agencia Alemana de Cooperación Internacional (GIZ, por sus siglas en alemán) actúa en la cooperación para el desarrollo y reforzamiento para un sistema mexicano de formación dual y, según el doctor Klaus-Dieter Przyklenk, quien es director del programa de desarrollo del Modelo Mexicano de Formación Dual, el sistema que se opera en Alemania depende de dos principales actores: el sector público y la iniciativa privada.
“Es una combinación entre la práctica y la teoría, es una especificación que se encuentra en Europa en por lo menos tres países. Es un modelo muy exitoso por su contribución a la sabiduría, ya que con una educación de este tipo aumentan las posibilidades para los jóvenes de encontrar un mejor trabajo”, explicó Klaus-Dieter Przyklenk, en entrevista con la Agencia Informativa Conacyt.
| 60 por ciento de los jóvenes alemanes recibe una formación bajo el sistema dual. |
El propósito de las instituciones mencionadas por traer esta iniciativa a México deriva por la falta de personal calificado en el mercado laboral y una demanda muy alta por carreras específicas.
“En el 2013 se implementó el proyecto en ocho carreras en el Colegio Nacional de Educación Profesional Técnica (Conalep) y con alrededor de 100 empresas mexicanas y alemanas, esto fue definido como un modelo piloto, por lo que la GIZ se ha sumado para apoyar, cooperar y aumentar los esfuerzos porque la necesidad es muy alta”, dijo Klaus-Dieter Przyklenk.
En el MMFD, a partir del tercer semestre el alumno se convierte en aprendiz de una empresa de acuerdo con un plan de formación individualizado, intercalando las prácticas en las empresas y la teoría en las aulas, el papel de aprendiz en la industria dura alrededor de uno año a dos, dependiendo la carrera.
“Se trata de ampliar la cantidad de las empresas que participan en este modelo y la cantidad de los aprendices; es una cooperación para reforzar el desarrollo del modelo en esta fase y hay que verlo para tomar lo mejor de estas, las primeras experiencias”, consideró el director del programa de desarrollo del Modelo Mexicano de Formación Dual acerca del papel de la GIZ.
Opción para la educación media superior
La GIZ entró al proceso de desarrollo del MMFD el presente año y uno de los objetivos, junto con la SEP, es implementar este modelo como parte del sistema educativo y que en un futuro pueda ser una opción más para todos los alumnos mexicanos en el nivel medio superior.
“Nosotros estamos más involucrados en los conceptos estratégicos y políticos para que los estándares de competencia sean muy altos, nos interesa mucho poder involucrarnos en el aumento de las capacidades de las instituciones en vertientes como la capacitación del personal y poder apoyar a los dos grandes sectores, el público y el privado”, agregó el doctor Przyklenk.
Las primeras experiencias de contacto con el modelo han sido de diferentes tipos, desde las empresas que, según el doctor Przyklenk, se han expresado muy contentos con los resultados, y sobre todo con las competencias que han obtenido los aprendices.
Otro de los resultados del MMFD es que los jóvenes han tenido grandes beneficios en la formación de su personalidad, “esto se da porque están involucrados de manera real en el proceso de producción de una empresa; aprenden a cooperar con sus colegas, resolver problemas concretos que se presentan en una línea de producción”.
Asimismo, los aprendices también se han mostrado muy contentos en la mayoría de los casos con esta nueva forma de aprender haciendo, además de que a muchos alumnos les beneficia más la práctica que la teoría, dijo Klaus-Dieter Przyklenk.
Mencionó que hasta el momento las experiencias han sido buenas en los dos años y medio que lleva de implementarse; no obstante, dijo que para establecer con bases sólidas un programa con conceptos de este tipo se requieren de aproximadamente 10 años.
“Actualmente hay mil 443 alumnos en México bajo este Modelo Mexicano de Formación Dual, la política oficial del gobierno mexicano es aumentar las empresas que participan y aumentar las carreras, pues ahora son solo 13, para poder ampliar una cobertura en todo el país”, concluyó el doctor Przyklenk.
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