Exploran en la UNAM nuevas aplicaciones para el almidón
Por Elian Mireille Martínez Gómez.
México, DF. 29 de octubre de 2014 (Agencia Informativa Conacyt).- El almidón, que comúnmente es empleado en la industria de alimentos para la producción de caramelos, galletas o como espesante, puede ser usado en la industria de biofármacos como vehículo de proteínas terapéuticas, purificación de proteínas o intermediario en el mejoramiento de los bioplásticos.
En el Instituto de Investigaciones Biomédicas (IIB) de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) investigan el uso de módulos de unión del almidón para brindar características antimicrobianas a los bioplásticos compuestos de este biopolímero, con el fin de mejorar los procesos de purificación de proteínas y acoplarlos, junto con el almidón, como vehículo de agentes terapéuticos.
Las proteínas tienen innumerables aplicaciones. Por ejemplo, en la industria farmacéutica se encuentran proteínas terapéuticas como la insulina para el tratamiento de la diabetes o anticuerpos contra el cáncer; mientras que en la industria de alimentos las proteínas se usan en la clarificación de jugos y cerveza, y también en la fabricación de derivados lácteos. Otra aplicación es como agentes desmanchadores o blanqueadores en la industria del papel.
Sin embargo, la purificación de proteínas es un reto para la ciencia, ya que por sus bajos rendimientos, incrementa el costo de los productos elaborados con este método. Por ello, un equipo de científicos del IIB, liderado por la doctora Romina Rodríguez Sanoja, diseña un sistema que permite purificar las proteínas en un paso, a un costo más barato y con una eficiencia mucho mejor que el sistema comercial más utilizado en los laboratorios, que es por columnas de afinidad, las cuales se basan en la interacción específica y reversible entre los componentes de la columna - soporte sólido- y la proteína que se produjo para poder separarla de la mezcla de otros componentes del proceso de obtención de proteínas recombinantes.
Para este mismo sistema de módulos de unión a carbohidratos, la doctora Rodríguez Sanoja propone inmovilizar proteínas antigénicas de tuberculosis y tétanos en gránulos de almidón, para que, al ser suministradas vía oral, logren atravesar el tracto gastrointestinal sin degradarse e induzcan una respuesta inmune. Actualmente esto ya se ha probado en ratones.
Una nueva aplicación que propone la doctora Rodríguez Sanoja es emplear los módulos de unión de carbohidratos para conferir propiedades antimicrobianas a los bioplásticos hechos de almidón.
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