Ingeniería en biotecnología, una carrera en ascenso en Guadalajara
Por Montserrat Muñoz
Guadalajara, Jalisco. 30 de marzo de 2016 (Agencia Informativa Conacyt).- El crecimiento de la biotecnología como área de oportunidad y de generación de conocimiento ha impactado el estado de Jalisco y sus universidades, de forma tal que se crean nuevas carreras en biotecnología y se equipan laboratorios para el desarrollo de conocimiento en esa materia.
"Está en todos lados. El boom de la biotecnología a nivel mundial impacta en Jalisco porque estamos instalados en una región tecnológica, donde hay mucha industria farmacéutica. Es todo un ecosistema estatal que está buscando desarrollar tecnología", reconoció el maestro en biotecnología productiva Cristóbal Camarena Bernard.
Por su parte, la doctora en ciencias, María José Rivas Arreola, remarcó la situación actual de la biotecnología en Jalisco. "Creo que estamos en un punto donde podemos vivir un efecto mariposa para la biotecnología en México, pero sobre todo en Jalisco. Estamos en un punto muy afortunado. Hay un ecosistema de médicos, cada vez más vinculados y abiertos a la posibilidad de hablar con gente que desarrollamos biotecnología, e integrándonos podemos generar grandes cosas, es muy afortunado todo lo que está pasando".
"Es un área biofarmacéutica la que se está desarrollando en Jalisco. Las empresas que están montadas en Jalisco son empresas mexicanas que están invirtiendo en generar conocimiento e incorporar gente con un grado de pericia muy alto en estas áreas", señaló la investigadora en entrevista para la Agencia Informativa Conacyt.
Ambos investigadores coordinan los esfuerzos de la ingeniería en biotecnología en dos de las principales universidades en Guadalajara: Camarena Bernard en el Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Occidente (ITESO) y Rivas Arreola en el Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Monterrey (ITESM), campus Guadalajara.
Nuevo laboratorio de biotecnología en ITESO
Enmarcado por este panorama, el Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Occidente inauguró su Laboratorio de Biotecnología, en coinversión con el Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt) y el Instituto Nacional del Emprendedor (Inadem).
Para una mejor preparación de los recursos humanos egresados del ITESO, es que sirven estos espacios, señaló Cristóbal Camarena Bernard. "Los alumnos necesitan más práctica y así disminuimos los tiempos de capacitación de las empresas", acotó, y destacó que este laboratorio podrá también ser utilizado por investigadores de la iniciativa privada que deseen llevar a cabo estudios biotecnológicos.
En entrevista para la Agencia Informativa Conacyt, el coordinador de ingeniería en biotecnología del ITESO señaló que el equipamiento con que cuenta este laboratorio es de los mejores a nivel universidad en la región occidente del país, ya que tiene cuatro áreas dedicadas a la microbiología, biología molecular, biorreactores y bioseparaciones.
Cuenta con un espacio aislado que cumple con las especificaciones y medidas de nivel dos de bioseguridad. Además hay dos almacenes: uno de cristalería, reactivos, equipos móviles y el de refrigeración, donde se crean condiciones de temperatura bajo las que se realizan análisis específicos.
El espacio delimitado con las condiciones de nivel dos tiene esclusas en los accesos para mantener la asepsia del sitio, donde se pretende realizar cultivos de cepas patógenas que requieran limpieza y condiciones especiales. El espacio tiene presión positiva y el aire acondicionado está filtrado.
El laboratorio está equipado con un analizador bioquímico, lector de placas con florescencia, aparato de espectrofotometría, campanas de flujo laminar (para trabajar en condiciones estériles), equipos para preparación de medios, microscopios, incubadoras con agitación orbital y con control de temperatura, autoclave, cámara de muestra controlada para crear atmósferas específicas, cuatro minirreactores, un biorreactor de siete litros, termociclador, centrífugas y una incubadora de análisis de geles.
Si bien la principal función del laboratorio es brindar a los alumnos espacios donde poner en práctica la teoría adquirida, hay sectores de la iniciativa privada que podrán hacer uso del espacio para la investigación. El docente reconoció que debido al equipamiento, las áreas de la biotecnología mayormente beneficiadas serían la farmacéutica y la industria alimentaria.
"Actualmente, las biomoléculas de interés farmacéutico son creadas en China o India. En este laboratorio ellos mismos podrían manufacturar sus productos", señaló el catedrático, quien afirmó que las instalaciones permitirían el desarrollo de un medicamento hasta en 60 por ciento del proceso.
En tanto, el laboratorio ofrece el espacio para optimizar e innovar procesos en la industria alimentaria. Hablando en específico sobre la industria especializada en lácteos, Camarena Bernard afirmó que se podrá investigar todo lo relacionado con fermentaciones y producción de lactobacilos, por ejemplo.
Certificación en biofarmacéutica: ITESM
María José Rivas Arreola, catedrática del Tecnológico de Monterrey, acotó que la casa de estudios creó recientemente una certificación en biofarmacéutica disponible únicamente en el campus Guadalajara, misma que surgió como respuesta a la demanda del sector industrial en la región.
“Es una concentración muy específica en un área muy importante para la región. La capacitación de los muchachos para la industria farmacéutica (a través del certificado) es muy sólida”, señaló la profesora.
Con esta especialización, los estudiantes de esta ingeniería podrán orientar su carrera a la investigación y desarrollo de procesos, pruebas clínicas, biorreactores para productos farmacéuticos y aspectos regulatorios de la normativa gubernamental.
Además de esta nueva línea de investigación, los alumnos pueden optar por especializarse en biología molecular o bioprocesos, esta última enfocada en la producción a gran escala, diseño de equipos y procesos.
Algunas empresas involucradas en la creación de esta certificación son Pisa Farmacéutica, Boehringer, Rimsa, Biopharm, Opko, Altus y Laboratorios Sophia, entre otras.
Una carrera en ascenso
La carrera de ingeniería en biotecnología inició en agosto de 2014 en el ITESO y al día de hoy cuenta con más de 100 inscritos, lo cual representa una importante población comparada con otras ingenierías de la universidad, reconoció el docente. En tanto, para el Tecnológico de Monterrey esta carrera ya lleva seis años ofertada, con tres generaciones de egresados.
Sin embargo, hay algunos escépticos a esta ingeniería como opción profesional. "Existe cautela de los padres, pero les explico de los laboratorios y del clúster de farmacéuticas, que son empleadores en potencia, así como de la industria de alimentos, donde Jalisco es uno de los principales productores agrícolas de México. Hay un gran potencial para ejercer como biotecnólogo. El ecosistema emprendedor en la biotecnología está repuntando mucho", concluyó el catedrático.
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