Colaboran investigadores mexicanos en desarrollo de nueva vacuna contra gripe estacional
Por Carmen Báez
México, DF. 15 de enero de 2015 (Agencia Informativa Conacyt).- Investigadores del Instituto de Biotecnología de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), encabezados por los doctores Laura Alicia Palomares Aguilera y Octavio Tonatiuh Ramírez Reivich, participaron en el desarrollo de una nueva vacuna para la prevención de la gripe estacional, cuya creación recibió a finales de diciembre de 2014 el Premio a la Innovación de Productos Nuevos por la empresa Frost & Sullivan, compañía consultora sobre mercados y tecnología en Estados Unidos.
Este reconocimiento, informó la compañía en su página de internet, se otorga a la empresa que ha destacado en el desarrollo de un producto innovador que aprovecha las tecnologías de vanguardia y ofrece importantes características de valor añadido.
En entrevista para la Agencia Informativa Conacyt, la doctora Palomares Aguilera, quien es miembro del comité asesor científico de Protein Sciences Corporation, empresa responsable del desarrollo tecnológico, señaló que esta vacuna es única en el mundo ya que se trata de la primera vacuna contra la influenza en el mercado que utiliza la tecnología del ADN recombinante.
A diferencia de las tecnologías tradicionales en las que se utiliza el virus de la gripe infecciosa y es cultivado en huevos, con la tecnología del ADN recombinante se utiliza el gen del virus para producir la proteína, lo que permite la producción de vacunas en poco tiempo.
"Con las tecnologías tradicionales, tomas estos virus del ambiente e infectas a los huevos pero el virus no está adaptado a crecer en huevos, lo que muchas veces requiere cierto números de pases (de transferencia) para que se adapte y poder producir cantidades suficientes para la nueva vacuna; esto hace que el proceso de producción tome varios meses", dijo.
"Con esta tecnología ya no tienes que hacer nada de eso; ya solo tienes la secuencia, se la pones a un sistema montado y solo se le debe poner un cartucho, entonces el sistema empieza a producir la vacuna. Eso hace que el tiempo se reduzca; en menos de un mes se puede producir una nueva vacuna, lo que permite responder muy rápido a nuevas cepas que pueden estar circulando", agregó la investigadora.
Salud pública y seguridad nacional
El grupo de científicos de la UNAM que trabaja con la compañía desde 2007, al ser uno de los pocos en el mundo enfocados a la producción de proteínas virales y glicobiología, colaboró en la caracterización y producción de esta nueva vacuna. "Las proteínas tienen azúcares pegados y nosotros participamos en la caracterización de estos azúcares y en la proteína, y en cuestiones de producción", expresó la investigadora del Departamento de Medicina Molecular y Bioprocesos del Instituto de Biotecnología.
Palomares Aguilera, quien es doctora en Ciencias y miembro del Sistema Nacional de Investigadores (SNI) con el nivel III, señaló que estas colaboraciones son muy importantes para México, ya que la producción de este tipo de vacunas es cuestión de seguridad nacional.
Se espera que la vacuna llegue al país en la próxima temporada invernal. Protein Sciences Corporation, la empresa farmacéutica mexicana Laboratorios Liomont y el Instituto de Biotecnología de la UNAM, firmaron un convenio para iniciar su registro en México a partir de octubre de este año.
La investigadora detalló que con esta estrategia de colaboración se pretende hacer una transferencia de la vacuna y realizar la manufactura en México. Sin embargo, dijo, se trata de un proceso de mucho trabajo, ya que las entidades regulatorias deben contar con las herramientas necesarias para confirmar que esta vacuna es eficiente y segura para la población mexicana.
"Si nos cae una pandemia necesitamos poder responder por nosotros mismos y no depender de terceros. [...] El poder trabajar desde cero en estos proyectos, donde los mexicanos aprendemos cómo es la ruta para obtener el registro de un producto biotecnológico de última generación, nos enriquece mucho como país y a mí como investigadora", comentó.
"Esto hace que este tipos de cosas permee a México y nos demos cuenta que nosotros también somos capaces de hacerlo. Definitivamente son los primeros pasos y considero que fortalecen la biotecnología mexicana, con el objetivo de que tenga sus propios productos más adelante", concluyó Palomares Aguilera.
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