Invitan a joven mexicano a realizar estancia de investigación en Centro Aeroespacial Alemán
Por Armando Bonilla
Orizaba, Veracruz. 17 de septiembre de 2016 (Agencia Informativa Conacyt).- Oscar Ortega Villagrán, estudiante del noveno semestre en la carrera de ingeniería química del Instituto Tecnológico de Orizaba (ITO) —que forma parte del Tecnológico Nacional de México (Tecnm)—, recibió una invitación para realizar una residencia profesional en el Centro Aeroespacial Alemán (DLR, por sus siglas en alemán).
De acuerdo con el joven, se trata de la primera vez que el Departamento de Alta Temperatura y Recubrimientos Funcionales, del Instituto de Investigación de Materiales del DLR, realiza una invitación de este tipo a un alumno mexicano que apenas cursa el nivel licenciatura, toda vez que este tipo de invitación se destina habitualmente para alumnos de maestría y doctorado con mayor experiencia en temas de investigación.
La invitación se dio luego de que el joven realizó una estancia de investigación en el Centro de Investigación y de Estudios Avanzados (Cinvestav) Querétaro, del Instituto Politécnico nacional (IPN). De manera particular, el joven mexicano trabajó en el Centro Nacional de Proyección Térmica (Cenaprot).
Entrevistado por la Agencia Informativa Conacyt, el estudiante oriundo de Orizaba detalló que durante su estancia y participación en el Cenaprot (consorcio de investigación integrado por Ciateq, Cidesi y Cinvestav Querétaro, dentro del Programa de Laboratorios Nacionales de Conacyt), también acudió al Primer Congreso Internacional de Ingeniería de Superficies (ICSE-Q 2016).
Agencia Informativa Conacyt (AIC): ¿Cuál fue el motivo de la invitación que recibiste?
Oscar Ortega Villagrán (OOV): La invitación se dio gracias a que realicé, como parte del programa Delfín, una estancia de investigación en el Cinvestav de Querétaro, en el Centro Nacional de Proyección Térmica.
Durante dicha estancia tuve la oportunidad de participar en la inauguración del Cenaprot, formando parte del comité de logística, y de asistir al Primer Congreso Internacional de Ingeniería de Superficies dentro del cual también tuvo lugar el 1er Taller Internacional de Rociado Térmico en Querétaro.
Al congreso asistieron importantes investigadores de renombre internacional y gracias a ello tuve la oportunidad de conocer al jefe del Departamento de Alta Temperatura y Recubrimientos Funcionales, del Instituto de Investigación de Materiales del DLR, quien tras conocer mi proyecto de investigación me realizó la invitación directa para acudir al Centro Aeroespacial Alemán.
AIC: ¿En qué consistió el trabajo que realizaste durante tu estancia en el Cenaprot?
OOV: Antes quiero explicar que yo llegué a mi estancia en el Cenaprot con la intención de realizar prácticas profesionales de mes y medio dentro del Programa Delfín, desarrollando un proyecto de investigación derivado de una tesis de maestría.
Se trató del trabajo titulado Estudio de la cinética de oxidación de compuestos intermetálicos, base níquel aluminio, es decir, trabajé en recubrimientos intermetálicos para la industria aeronáutica.
Hay que recordar que la ciudad de Querétaro está invirtiendo y atrayendo gran inversión en torno a la industria aeronáutica, de tal suerte que es sede de importantes empresas internacionales como Bombardier.
Consecuencia de ello, en el Cinvestav Querétaro hay diversas investigaciones relacionadas con esa industria y eso a mí me resultó particularmente interesante. Sobre todo me interesa trabajar en el desarrollo de materiales para ese sector.
AIC: ¿Cuál es el objetivo de tu visita al Centro Aeroespacial Alemán?
OOV: El objetivo es desarrollar un nuevo proyecto, pero que es una extensión y ampliación del trabajo que comencé durante mi estancia de verano en el Cenaprot. Obviamente se realizarán estudios mucho más completos y profundos gracias a que muchos equipos que ellos tienen, no los tenemos en el Cinvestav de Querétaro.
Algunos de los estudios que tendré la oportunidad de realizar son preparación metalográfica de muestras y el análisis de las características estructurales, microestructurales y químicas mediante difracción de rayos X, microscopía electrónica de barrido y espectroscopía de dispersión de energía, respectivamente.
Asimismo, estudios de oxidación y análisis termogravimétrico; deposición de un cerámico superior; evaluación del desempeño bajo ciclos de fatiga térmica de las muestras.
La relevancia de estos esfuerzos de investigación radica en que dichos recubrimientos cerámicos mejoran el desempeño de las turbinas de los aviones, pero también cuentan con aplicaciones en las turbinas de generación eléctrica.
AIC: ¿Por qué es importante para ti haber recibido esta invitación, qué expectativas te genera?
OOV: Me encuentro en un momento de mi vida donde intento definir si mi verdadera vocación es la investigación científica. Tengo claro que soy una persona muy curiosa, pero mi estancia en el DLR me ayudará a definir si me dedicaré a la investigación y si podré aportar a la generación de conocimiento e innovación tecnológica en mi país o determinar si exploraré otras opciones dentro de la industria aeronáutica.
Debo aclarar que en la búsqueda de mi verdadera vocación ya me encuentro bastante motivado hacia la investigación científica, ya que me parece que es la primera vez que el Centro Aeroespacial Alemán realiza este tipo de invitación a un estudiante de licenciatura.
Esto para mí es motivo de mucho orgullo, pero confieso que me encuentro muy sorprendido por haberla recibido y ante ello solo quiero hacer las cosas bien y poner el nombre de mi país muy en alto.
AIC: ¿Cuáles consideras que serán los principales retos a vencer una vez que te encuentres allá?
OOV: Seguro retos habrá muchos, pero tengo claro que debo aprovechar algunas cualidades para sortearlos, entre ellas, una gran ventaja será el dominio de algunos idiomas (tuve la oportunidad de vivir dos años y medio en Berlín, Alemania) y creo que eso fue un factor a mi favor para recibir la invitación.
Ahora debo aprovecharlo para hacer mejor las cosas allá, ya que no tendré que batallar tanto con la barrera del idioma. Más aún considerando que la mayoría de las investigaciones se realizan en otros idiomas, por ejemplo, la mayoría de la literatura científica está en inglés y es otro idioma donde tengo un nivel de dominio importante.
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