Líquenes, alarmas tempranas del deterioro ambiental
Boletín de prensa
2192/2016
Ciudad de México. 22 de marzo de 2016 (Agencia Informativa Conacyt).- Asentándose en el suelo, rocas, cortezas de árboles, hojas y una infinidad de sustratos antropogénicos, los líquenes son un grupo de hongos que establece una simbiosis mutualista con organismos fotosintéticos que pueden ser algas o cianobacterias, en donde ambos reciben beneficio uno del otro.
Esta asociación hace que estos organismos sean especiales, pues permite que los líquenes puedan colonizar ambientes extremos que otros seres vivos no logran, como desiertos helados en los polos geográficos, desiertos calientes en las zonas intertropicales, zonas costeras y las altas montañas.
La importancia ambiental de los líquenes radica en diversos factores, ya que son captadores de agua y reservorios de la misma, contribuyen a los ciclos biogeoquímicos de los ecosistemas que habitan, particularmente aquellos en los que participan cianobacterias, ya que fijan nitrógeno atmosférico y lo aportan a la biósfera, además proporcionan refugio y alimento a diferentes organismos, menciona María de los Ángeles Herrera Campos, investigadora y titular del Laboratorio de Líquenes del Departamento de Botánica de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
Detalla que al descomponerse liberan minerales que son útiles para el crecimiento de las plantas, intemperizan las rocas favoreciendo la formación de suelo y una vez formado este, condicionan la superficie en términos de humedad, temperatura y aglutinamiento para la germinación de semillas y establecimiento de comunidades vegetales.
EP/SP/FV/2192/2016