Una vida al servicio de la química
Boletín de prensa
295/2015
México, DF. 6 de mayo de 2015 (Agencia Informativa Conacyt).- La curiosidad de la infancia por conocer qué resulta de mezclar una sustancia con otra marcó a Oliverio Rodríguez Fernández, quien ha dedicado toda una vida a la química, lo que le se ha convertido en dirigir el Centro de Investigación en Química Aplicada (CIQA), que pertenece al Sistema de Centro Públicos de Investigación del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt).
“Siempre fui muy curioso desde niño y me gustaba mezclar cosas para ver qué pasaba. Eso me despertó el entusiasmo por la química al poner dos cosas diferentes y que resultara una tercera nueva, me entusiasmó a trabajar en la parte de la química”, dijo elocuente a la Agencia Informativa Conacyt.
Desde esos primeros comienzos supo de su vocación por la ciencia y decidió hacerla parte de su camino, que incluso, le permitió conocer a su esposa, con quien ha compartido pasillos universitarios y laboratorios en el mismo CIQA.
El doctor en Polímeros por la Universidad de Loughborough, en Inglaterra, compartió que los científicos están lejos de ser esos seres aislados de bata blanca que poco se conectan con la vida cotidiana; por el contrario, dijo, son personas semejantes a la mayoría de la población.
Su caso es singular. Ha dedicado los últimos 29 años de su vida a hacer ciencia en el CIQA, al ser un convencido de que la investigación impulsa el desarrollo tecnológico de los países que la producen, pues impacta positivamente en las áreas social e industrial.
La primera vez jamás se olvida. La experiencia inicial del doctor Rodríguez Fernández en un laboratorio fue en la Facultad de Ciencias Químicas, cuando cursaba la licenciatura: “Fue en 1979, sentí emoción por ver que lo explicado en la teoría podía ponerse en práctica; ahí me daba cuenta que en ocasiones eso acontecía como uno lo esperaba, pero en otras no resultaba; y eso despertó en mí la curiosidad de hacer investigación”.
Miembro del Sistema Nacional de Investigadores (SNI) con el nivel II, de la Sociedad Polimérica de México, de la Sociedad de Ingenieros Plásticos y de la Sociedad Americana de Química, en la actualidad realiza trabajos sobre materiales nanoestructurados en los cuales se incorporan nanopartículas, como óxidos metálicos, grafénicos o estructuras de carbono, a fin de modificar las propiedades eléctricas que mejoren su resistencia mecánica y que puedan ser aplicados en los sectores automotriz, aeronáutico y electrónico.
AG/LR/MO/295/2015