Por Verenise Sánchez Correa
México, DF. 13 de noviembre de 2014 (Agencia Informativa Conacyt).- Un equipo de científicos del Centro de Investigación en Materiales Avanzados (Cimav) unidad Durango creó un dispositivo que utiliza energía solar que descontamina el agua para librarla de microorganismos patógenos y elementos tóxicos como el arsénico y el flúor.
Estos dos minerales representan una amenaza para la salud pública mundial, ya que diversos países como Argentina, Bangladesh, Chile, China, India, México y Estados Unidos tienen altas concentraciones de ellos en el subsuelo, que después se filtran al agua y la contaminan.
María Teresa Alarcón, investigadora del Cimav, explicó para la Agencia Informativa Conacyt que en las zonas más áridas de México, el agua para consumo humano proviene de pozos con concentraciones muy altas de ambos elementos químicos.
Estos contaminantes naturales del agua se han convertido en venenos silenciosos, ya que no provocan una reacción inmediata en el organismo, sino hasta transcurridos 10 o 20 años, cuando se manifiestan enfermedades crónicas irreversibles como diabetes, cáncer y lesiones cutáneas, agregó la investigadora.
Para afrontar el riesgo potencial que representa el agua contaminada para la población, desde 2003 el Cimav inició el proyecto Desarrollo de tecnología para la remoción de flúor y arsénico en agua de consumo humano, financiado por el Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt).
Alarcón detalló que en los primeros años del proyecto trabajaron en el desarrollo de materiales para la captación, concentración y transformación de la energía solar en calor.